Pablo Fernández pide a la Junta que «retire el plan» y «refuerce la sanidad rural» en la provincia

La sanidad en Castilla y León y en concreto el plan propuesto por la Consejería de Sanidad de la Junta sigue preocupando en la provincia leonesa. En esta ocasión ha sido Pablo Fernández, líder de la formación morada, quien ha puesto de manifiesto que el nuevo modelo de asistencia sanitaria «supone, a nuestro juicio, el mayor ataque a la supervivencia del medio rural».

Fernández considera que «el plan es un paso más al desmantelamiento de la sanidad pública» y que tendrá especial incidencia en la provincia leonesa donde se estiman que serán cerrados cerca de 509 consultorios. Una crítica que asegura se entiende «como parte de la concepción que el Partido Popular y Ciudadanos tiene de la sanidad como un negocio y para ellos el medio rural no es rentable».

Por todo ello, desde Podemos y con Pablo Fernández a la cabeza han pedido a la Consejera y a la Junta de Castilla y León que «retire el plan» de encima de la mesa y comience conversaciones con los colectivos y profesionales afectados para llegar a unas medidas. Fernández considera que «lo que necesita la provincia es reforzar la sanidad rural y este plan es la antítesis».

El procurador en las Cortes de Castilla y León también alertó de las bajas por jubilación que se producirán en los próximos años y que harán que el 40% de las plazas de médicos de familia y el 20% de los pediatras queden sin cubrir. «Y la Junta no da solución a esta carestía», ha criticado.

Pablo Fernández ha lamentado también que en la convocatoria de 2020 para León «se contempla ofertar 33 plazas de medicina especializada de las 40 que hay acreditadas». Un hecho que no logra entender, ya que si la propia Junta de Castilla y León reconoce que uno de los problemas es la falta de personal y en León se ha cifrado en 40 plazas «como es posible que ni siquiera se cubran esas plazas».

Una actuación que según Fernández «denota la incompetencia y la inutilidad de la Junta» y que a su vez pone de manifiesto el «desconocimiento de la situación de la provincia leonesa».

Desde Podemos, también han querido añadir que aumenten «al menos a 100 millones» el presupuesto para formar a los profesionales de MIR, para los que actualmente hay 59 millones.

Pablo Fernández ha recordado los «agravios y retrasos» en las promesas de la Junta de Castilla y León con la provincia leonesa.

El centro de salud de Villaquilambre, el del Ejido, Sahagún, la reforma de Pinilla, Bembibre, el centro de especialidades de Ponferrada «son obras que se llevan dilatando en el tiempo desde años y que la Junta no hace nada», ha criticado.

Desde Podemos también han mantenido una reunión con el colectivo de autónomos (Aupa), una de las partes fundamentales de la sociedad. En este ámbito consideran que «es esencial y está en situación de emergencia».

Pablo Fernández ha insistido en que «los autónomos siguen viendo mes a mes y año tras año como esta provincia es la que más puestos destruye». A este respecto, ha prometido «medidas en el Gobierno de la nación que esperamos se conforme en las próximas semanas». Así como en la Junta de Castilla y León.

Entre ellas ha remarcado la importancia de que «las cotizaciones sean en función de lo que ingresen» los autónomos y también una ayuda del Gobierno con aquellos negocios que atraviesen necesidades, «si se rescató en su momento a los bancos con más motivo a los autónomos»