Borrar
Un instante del juicio celebrado en la Audiencia Provincial por el crimen de Villaobispo.

Ver fotos

Un instante del juicio celebrado en la Audiencia Provincial por el crimen de Villaobispo. Campillo

El fiscal rebaja la pena de uno de los acusados y mantiene a ambos como coautores del homicidio de Villaobispo

Última sesión del juicio por el crimen de Villaobispo en el que se han leído las conclusiones finales del fiscal y las defensas | El Ministerio Fiscal rebaja la pena de F.M.M.F. a 11 años de prisión por un delito de homicidio con el atenuante del consumo habitual de drogas, para M.M.F. mantiene la petición de 13 años de cárcel por el delito de homicidio

I. Santos

León

Jueves, 2 de diciembre 2021, 11:20

Necesitas ser registrado para acceder a esta funcionalidad.

Compartir

Cuarta y última sesión del juicio por el crimen de Villaobispo y llega el turno de las conclusiones finales del Ministerio Fiscal y las dos defensas de los hermanos acusados.

El juez ha explicado al jurado popular que este viernes se entregará el objeto del veredicto para que «comiencen las deliberaciones» y determinar si los dos acusados por la muerte de un joven de 31 años en un tiroteo en Villaobispo el 8 de noviembre de 2008 son culpables o inocentes.

Una jornada en la que uno de ellos, M. M. F. quien asegura no haber estado en la localidad, ha querido aprovechar su última palabra para dirigirse a los presentes e insistir en que «el fiscal está equivocado, se equivoca de lleno y soy completamente inocente». Por su parte, su hermano no ha querido tomar la palabra en este último alegato.

Penas y delitos de las partes

El fiscal mantiene la petición de homicidio y tenencia ilícita de armas como los delitos cometidos y considera a los dos hermanos culpables, pero rebaja de 13 años a 11 años de prisión la condena de F.M.M.F. por considerar que era adicto a las drogas y ser este un atenuante. Mantiene los 13 años de cárcel para el segundo de los acusados y un año y medio más a cada uno por tenencia ilícita de armas.

La defensa de F.M.M.F pide su absolución por considerar que «en caso de haber sido él el causante de la muerte del otro hombre, actuó en legítima defensa». Por su parte, la defensa de M.M.F. insiste en que su cliente no estaba en el lugar de los hechos y que «no hay ni una sola prueba objetiva que así lo indique» por lo que «solicito un veredicto de no culpabilidad»

«Los dos estaban presentes»

El fiscal ha explicado que tras la celebración del juicio llega a la conclusión de que la víctima y sus hermanos vinieron a León con «motivo de las diferencias previas» y asegura que «las pruebas han demostrado que los dos acusados estaban presentes y que ambos dispararon contra la víctima y que fue un disparo de F.M.M.F. el que le causó la muerte».

El fiscal ha considerado que todos los testimonios del juicio ayudan a construir la escena de los hechos y asegura que «cada uno de los acusados huyó hacia un lado», por lo que certifica que «estaban los dos acusados en la escena y dispararon los dos».

«Actuación conjunta»

Para el fiscal «los dos actúan conjuntamente, que uno lo consiga no implica que no sean culpables los dos». Por ello, mantiene que son coautores del delito de homicidio. Y en estas conclusiones el fiscal ha querido remarcar que en las llamadas intervenidas y las declaraciones de J.R.F, hermano del fallecido, quien ante los Juzgados aseguraba que no había visto nada y no sabía nada, pero ante su familia insistía en que «les había visto a los dos y que no dijeran nada».

«Habían venido buscando a los hermanos con una intención de revancha, venían con una escopeta que portaba la víctima al lado del coche y luego hasta la esquina portada por su hermano, pero nunca fue disparada», añade el fiscal.

Una evolución de los testigos

La defensa de F.M.M.F. plantea dos posibles líneas de sucesión de los hechos. El abogado considera que «Antonio dispara primero, es un tema que no hay que discutir, es el principio acusatorio y lo ha escrito el fiscal», iniciaba su intervención una de las partes de la defensa. El abogado ha insistido en que la víctima y sus hermanos venían a «vengarse» y ha recordado a los miembros del jurado popular algunas partes del juicio en las que considera que «hay una evolución en los testimonios».

«Este señor -en referencia a uno de los testigos- dice que no vio a nadie porque estaba de espaldas y ahora dice que los reconoce por el mentón», relataba el letrado, asegurando que «hay una evolución, yo cuando más tiempo pasa menos recuerdo y los testigos de este caso van al revés, en el momento no lo recuerdan y ahora les pueden reconocer».

También ha insistido en que fue «una venganza» y en este sentido ha querido remarcar que no es creíble que «vengan a atentar contra una familia y ¿sólo llevan un arma? Eso es absurdo».

Legitima defensa

Pero su defensa se ha centrado en la «legítima defensa» remarcando que se cumplen todos los criterios marcados por la ley y explicando al jurado popular que «si atacan a tu hijo con un machete, no te planteas golpear sólo una vez. Tú das 700 machetazos u 800 machetazos, los que sean necesarios, pero no sólo uno midiendo que pueda ser legitima defensa».

«Lo contrario sería ser un idiota», finalizó.

Por otro lado, insistió en que «no hay elementos de juicio para determinar quien disparó, pero será en cualquier caso una actuación en legitima defensa» y en este sentido remarcó que «se abrió un proceso por intento de homicidio a los hermanos R.F.».

Falta de pruebas

«Declaraciones seleccionadas para que identificaran a Mariano, reconocimientos fotográficos mal hechos y antecedentes inexistentes». La letrada que lleva la defensa de M.M.F. ha insistido durante todo el proceso que su cliente no estaba en el lugar y «no tengo clara la prueba que ha traído a Mariano a sentarse aquí».

La letrada consideró en esta última sesión que «hay un criterio selectivo de los datos que quieren para mantener la acusación contra Mariano». La abogada remarcó en varias ocasiones «lo mal que se ha hecho desde el minuto uno» y aseguró que «nunca he visto nada igual» en relación al procedimiento de investigación y las labores de la Guardia Civil en el lugar de los hechos.

Para mantener la defensa de que su cliente no estaba en Villaobispo la letrada ha recordado que en los registros, «se vio documentación de otros familiares y el instructor aseguró que no había ninguna prueba objetiva de que M. viviera allí».

Presunción de inocencia

Ante eso critica que «el fiscal le acusa de empuñar un arma y disparar», cuando para ella «no hay ni un sólo testigo concluyente que identifique a M. allí, y menos que portase un arma». Un hecho que consideró «sangrante» y que se eleva a «una falta de respeto a la presunción de inocencia».

«La justicia es dar a cada uno lo que le corresponde y si a M. aquí no le corresponde nada, no se le da nada, pero no podemos llevar a la cárcel a una persona inocente», finalizó su intervención pidiendo al jurado popular «un veredicto de no culpabilidad».

Reporta un error en esta noticia

* Campos obligatorios