Que San Antón te bendiga, amigo

Tanto que se convierte en uno más de la familia, creándose un vínculo difícil de explicar a aquellos que no comparten su vida con un animal. Y precisamente, un año más, los perros se han convertido en los únicos protagonistas de la tradicional bendición de San Antón en la que apenas se han dejado ver otros animales.

Para muchos leoneses, es ya una cita obligada en el calendario y, año tras año, cumplen con la tradición de bendecir a su mascota. Para otros, sin embargo, era una asignatura pendiente y otros simplemente no han alcanzado el año de vida por lo que se entrenaban en esta celebración.

Eso sí, todos se encomendaron a San Antón con una petición, diferente, aunque en su mayoría pedían salud para su mascota. Aunque si en algo han coincidido todos los leoneses que este domingo se han acercado hasta la iglesia de San Marcelo es en el cariño que procesan hacia ese animal que les acompaña en su día a día.

Por ello o, mejor dicho, por ellos poco ha importado el frío que ha acompañado a la mañana de este domingo en León capital ni la larga cola y espera para ver al Santo.

Allí, minutos antes de las dos de la tarde, la imagen del santo acompañado por dulzainas ha dado tres vueltas a la iglesia para, posteriormente, proceder a la lectura de los versos socarrones que han servido de preámbulo para el acto religioso y la posterior bendición de mascotas.

«Que San Antón te bendiga y evite los males del cuerpo». Así, uno a uno, el párroco de la iglesia de San Marcelo ha dado la bendición a las decenas y decenas de mascota a los que sus dueños han querido brinda un año de salud a su lado.

Se trata de un acto organizado por la Asociación Protectora de Animales y Plantas de León, la Asociación San Francisco El Real Extramuros y la Cofradía del Santísimo Cristo de la Expiración y el Silencio, que han cumplido con la tradición para honrar a San Antón con diversos actos tradicionales.

Precisamente por ello, al acto se han sumado varios perros de la Protectora de León que aún buscan hogar y que ha servido para demostrar la tenencia responsable de animales que existe en León y además de fomentar los valores de la convivencia entre personas y animales.

En el siglo III, San Antonio Abad vagaba por el desierto egipcio. Allí creó una comunidad de hombres solitarios que paseaban su soledad en retiro por la inmensidad de los mares arenosos. Ese grupo que fue conformándose en torno a la fe cristiana y su relación con la naturaleza hizo que su 'capataz', San Antón, fuera acogido por la «pascua cristiana» como patrón de los animales.

Desde entonces, la tradición lleva a que los leoneses, en esta festividad, saquen a sus mascotas a las calles. Con el paso de tiempo, el tipo y número de candidatos a ser bendecidos ha variado sustancialmente, acorde con unos tiempos en los que el animal ha variado su papel dentro de los roles 'familiares'.

Se los bendice porque son creación de Dios, al igual que el hombre, porque sirven de alimento y porque dan compañía. El animal conforma una parte sustancial en la creación.