La homofobia es una realidad que sigue vigente en pleno Siglo XXI. La última en denunciarlo ha sido la actriz Andrea Duro, a través de las redes sociales y en esta ocasión haciendo referencia a su primo «por el simple hecho de ser gay».
Según cuenta la intérprete el parte de lesiones que ha presentado su primo se traduce en «un pómulo partido y el hombro dislocado por el guantazo que el de 'seguridad' le ha dado en el momento en que mi primo besaba a su chico».
El mensaje no ha pasado desapercibido para los usuarios de las redes sociales que se han encargado de difundir algunos de los comentarios que ha publicado la actriz.
En cuanto a la discoteca 'Jowke Club', objeto de las críticas de Andrea se ha defendido con las mismas armas que la actriz. Según publicaban en Twitter, la empresa «no discrimina por razón de raza, sexo o religión y cuenta en su plantilla con personal de muy distintos orígenes, nacionalidades y condiciones».