Reunida desde las cinco de la tarde del martes, la Junta Electoral salió ante los medios de comunicación para explicar su decisión, que no fue en absoluto sencilla. El presidente de la misma, Ángel Alonso, quiso poner el énfasis desde el primer momento en que el sistema electoral universitario “es muy robusto”, recordando lo extraordinario de la comparecencia, que fue debida “al gran revuelo causado en los medios de comunicación”.
El presidente de la Junta Electoral, Ángel Alonso, compareció sobre las seis de la tarde.
Respecto a las reclamaciones, explicó que una de ellas estaba relacionada con las incidencias que se pudieron haber producido en el propio proceso de las votaciones en las mesas, pero en este caso, y por unanimidad, “no consideramos que pudieran influir en el resultado final”. Si admitió el “lapsus” de no incluir en los resultados que se hicieron públicos los votos en blanco y los nulos, si bien argumentó que “no tiene mayor importancia ya que las dos candidaturas tienen fotocopias de las actas, lo corregiremos mañana y se podrán ver todos los votos que hay por mesa”.
La interpretación de una coma
Y aquí viene el punto de debate. O la coma, más bien. La Junta Electoral, formada por ocho miembros incluido el presidente, debatía sobre el punto 4 del artículo 79, en el que se mantiene la siguiente sentencia: “Será proclamado Rector, en primera vuelta, el candidato que logre más de la mitad del valor numérico de la suma de los votos a candidaturas, validamente emitidos [..]”. Y precisamente en la interpretación de la última coma es donde estuvo la discusión. La Junta se dividió entre los que interpretaban que la coma significaba una intersección y los que defendían que suponía una unión. Esto es, “votos a candidaturas, validamente emitidos”; o “votos a candidaturas y validamente emitidos”. Esta última interpretación entiende que los blancos son también votos validamente emitidos, postulado que salió adelante tras el empate a cuatro final, decidido por el voto de calidad del presidente, Ángel Alonso.
La nueva ponderación arrojaba que García Marín lograba así finalmente el 48,58 por ciento de los votos frente al 47,22 de Chamosa.
Reacciones con dureza
Las reacciones no se hicieron esperar. José Luis Chamosa fue el primero de los dos candidatos en comparecer ante los medios, leyendo un texto escrito anteriormente con nueve puntos, en los que aceptó los resultados electorales pero fue muy crítico con la jornada electoral, que calificó de “bochornosa” en lo que respecta a las presuntas actuaciones de Juan Francisco García Marín. En este sentido, defendió que para próximos comicios no existan los profesores apoderados.
El presidente de la Junta Electoral, Ángel Alonso, da explicaciones sobre el proceso a los medios.
Por su parte, García Marín “lamentó” los últimos hechos tras la jornada electoral, si bien desmintió las presuntas presiones realizadas durante el día de autos. También informó sobre la reunión mantenida con el rector saliente, José Ángel Hermida, que calificó de “coordial” y en la que ya han abarcado el tema del nuevo mapa de titulaciones, ya que se encuentra en un momento “bastante avanzado”.
Si no hay impugnación a la decisión de la Junta y si de existir esta no prospera, el viernes Juan Francisco García Marín será proclamado rector de forma oficial.