Rajoy, tras el debate: «Enfrente sólo hay ruido»
Rivera convoca a los indecisos a "dar un vuelco a las encuestas" y cambia su estrategia conservadora y se presenta como la alternativa a Rajoy e Iglesias
N. Vega / a. torices
Martes, 14 de junio 2016, 13:54
Pasadas las doce y media de la noche, la dirección del PP sentenció: "Rajoy vence y convence". El debate electoral con los cuatro principales candidatos en el plató acababa de concluir. El día después, en las filas populares se ha instalado la sensación de que la cita sirvió para "reforzar" la posición de salida de su candidato y contribuyó a "reafirmar" a su electorado. El presidente, al menos, está satisfecho. "Quedó claro que enfrente sólo hay ruido", ha sentenciado en el quinto día de campaña.
Ese era el objetivo: amarrar el bloque económico y deslizar una y otra vez el mensaje de que Rajoy es el único de los cabezas de cartel con experiencia de gestión y con capacidad, por lo tanto, de avanzar en la creación de puestos de trabajo. "Quedó claro que en España hay un proyecto en marcha para consolidar la recuperación, para que llegue a todos, para seguir creando empleo y mejorar la atención a la gente, a las personas, a los seres humanos y a las políticas sociales. Y quedó claro también que enfrente sólo gente empeñada en contarnos lo mal que van las cosas. No se puede construir sobre base de ser negativo y cenizo", ha censurado.
Es su nueva versión de 'Rajoy o el caos'. "El PP va a seguir apostando por lo que siempre hicimos: la seguridad, la estabilidad, la certidumbre y por gobernar bien. Y enfrente sólo está lo negativo y el desorden", ha concluido antes de enfatizar que "el pueblo español se merece algo más que chascarrillos y críticas por parte de personas que no han gestionado un euro en su vida".
Movilizar voto
La ruta del presidente continúa ahora en Granada, donde los populares perdieron el Ayuntamiento por la supuesta implicación del alcalde en una trama de corrupción. Andalucía es una plaza que el PP está cuidando con esmero en esta campaña. En varias de sus circunscripciones hay escaños en el aire. Es el caso de Almería, donde el número uno de la lista, Rafael Hernando, ha recordado que el último diputado se perdió "por 300 votos" y cayó del lado de Podemos. "Esto es lo que pasa cuando uno se queda en casa, cuando uno vota despistado otras cosas, que al final quienes ganan son los otros, y si uno no va a las urnas, vienen los otros", ha apelado al votante de centro derecha que optó por Ciudadanos en los pasados comicios o que se inclinó por la abstención.
Hernando ha responsabilizado, además, al electorado de la resolución del atasco político. "Los ciudadanos -ha insistido- tienen la oportunidad de desbloquear con su voto esta situación que el señor Sánchez, el señor Rivera y el señor Iglesias han institucionalizado en el Congreso, y esa movilización masiva es lo que va a permitir que tengamos una mayoría suficientes para por gobernar".
El debate a cuatro, en el que Albert Rivera está convencido de que realizó un gran papel, ha dado una inyección de moral al líder de Ciudadanos quien, solo doce horas después, decidió arrinconar su hasta ahora campaña conservadora, orientada a mantener los 40 escaños en el Congreso, y se lanzó a por todas de cara a los doce días que restan hasta los comicios del 26-J.
Rivera, tras una breve visita a Salamanca, recordó que, como había dicho al cierre del debate televisado, "el futuro empieza el 26-J y está en manos de los españoles" y convocó a los más de un millón y medio de electores que según el CIS aún dudan si votar Ciudadanos, PP o PSOE a coger de forma masiva la papeleta naranja para que sea posible "conformar un Gobierno a mejor". Pese a que el propio CIS coloca a Ciudadanos en la cuarta posición, a una gran distancia de los otros tres grandes partidos, el dirigente liberal aseguró, con un optimismo hasta ahora inédito, que "todavía podemos dar el vuelco a las encuestas".
El líder de la formación naranja cree que ahora es su momento no solo por el papel en el debate sino por que intuye que la floja imagen dada por Pedro Sánchez y el desgaste que provocó a Mariano Rajoy con los ataques por la corrupción que lastran al PP le han dado una gran visibilidad entre los electores templados de ambos partidos que ya le tenían como el segundo político más valorado. No tiene duda, según indicó, que "Ciudadanos se consolidó en el debate como la gran alternativa al conformismo (PP) y al populismo (Podemos)" y, añadió, que "hace falta que alguien lidere esta nueva etapa y no la van a liderar ni el que vende humo (Pablo Iglesias) ni el que dice que todo está bien (Rajoy)". "Estoy seguro de que hoy hay menos indecisos", afirmó justo antes de reclamar que el 26-J "nadie se quede en casa". "Les pido que se mojen", insistió.
Rivera probablemente ni en sus sueños piense en una victoria, pero sí en un fuerte incremento en escaños que le convierta en el partido determinante para un pacto de gobierno sin Podemos. Por si ese fuese el caso, volvió a realizar un guiño a todos los electores moderados que reclaman regeneración y dureza contra la corupción e insistió en que en el hipotético acuerdo que tiene en su cabeza no entrará Rajoy. En línea con el paso atrás para facilitar un diálogo con el PP que reclamó oficialmente a su líder en el debate, indicó que, "evidentemente, Rajoy no puede encabezar una nueva etapa política". Para que cualquier entendimiento con los populares sea posible, abundó, tendrá que haber "un nuevo Gobierno y un nuevo presidente". "Creo que he sido muy claro", remató.