La veteranía es un grado

¿Qué se siente cuando se marca al rival?

Ballesteros, autor material de algún gol en estos clásicos, reconoce que marcar un tanto a la Ponferradina es «la bomba». El ex mediocentro de la Cultural se muestra incapaz de describir una sensación «tan chula» porque un gol alegra pero que sea en el campo del rival y para ganar un derbi «para un cazurro es la bomba».

Fuentes, el rudo central berciano, no consiguió batir la portería culturalista, su trabajo era más bien defender la suya propia. Pese a ello, recuerda las celebraciones en este tipo de partidos «que tienen un plus» porque desde los días previo se encara el partido «de otra manera, con más efusividad y eso luego se traslada a la celebración».

Anécdotas de Fuentesnuevas

Un partido así deja varias anécdotas y esta vieja guardia de ambos equipos recuerdan la mayor parte de ellas en el antiguo Fuentesnuevas. Luis Ballesteros aún guarda en la memoria cuando le agarraron con un paraguas por el cuello al sacar un córner: «El míster era Carrete y yo no quería sacar más córner pero él me obligaba. Eso ahora es impensable». También recuerda salir escoltado del feudo berciano, aunque nunca hubo que lamentar ninguna situación dañosa.

El ex capitán blanquiazul no recuerda muchas anécdotas de estos derbis porque prefiere quedarse con las cosas buenas, «las malas se me olvidan». Aunque mantiene vivas las grandes tardes de fútbol en Fuentesnuevas como una remontada de su equipo para terminar ganando el partido.

¿Qué ha cambiado?

Queda claro que un Ponferradina-Cultural no es un partido más, aunque los derbis de ahora no sean como los de antes. «Hace años éramos 12 ó 14 de León y Ponferrada, ahora casi no hay jugadores de la provincia», lamenta el culturalista.

Sensación similar respira Juan Manuel Fuentes, aunque cree que los jugadores de fuera se contagian rápido por los mensajes y sentimiento de las aficiones: «La única diferencia es que hace más tiempo que no nos enfrentamos, pero en la segunda vuelta todo volverá a ser igual».

El último consejo

Controlar los nervios para que la intensidad no te lleve antes de tiempo a los vestuarios pasa por ser la principal norma que un entrenador suele dar antes de pisar el césped. Luis Ballesteros recomienda, lo mismo que le dice a su hijo antes de cada partido, «que disfruten», porque cuanto mejor lo pasen en el campo mejor saldrán las cosas. «El míster decidirá el once y mientras más disfruten y hagan las cosas trabajadas mejor les irá. Que nadie trate de inventar», eso solo les llevará a ser protagonistas por las malas.

Fuentes considera que el ingrediente fundamental antes de salir al campo en un derbi debe ser «mezclar bien la motivación y la tranquilidad». El central cree que la motivación no puede estar descontrolada «ya que no es bueno ponerse nervioso».

El favorito del derbi

Si en algo coinciden ambos veteranos es en que no hay favorito en un derbi. El culturalista cree que depende como transcurra la temporada «en la segunda vuelta podría haberlo». Ahora, con nuevo entrenador y nuevos equipos, no hay favorito aunque si alguien tuviera que serlo «sería la Ponfe por jugar en casa, aunque dentro del vestuario se querrán quitar esa presión».

El deportista explica que en un derbi puede pasar de todo, pero el que juega en casa «quizá parte como favorito».

A ambos les gustaría una victoria de su equipo. Ballesteros se atreve a dar un resultado «un 1-3 me gustaría, ganar y si se puede ser dar una sensación de equipo buena para afrontar la liga». Fuentes no da un marcador pero confía en que los suyos desplieguen buen juego y consigan un resultado positivo.

Los dos veteranos confían en sus aficiones, y les piden que disfruten al máximo «que prime el buen rollo y no paren de cantar, pero con respeto. Ojalá se viva una fiesta del fútbol», pide el medio culturalista. Misma línea muestra Fuentes que solicita a la grada «que disfrute al máximo de su equipo y del juego que hagan».

Todo listo para la gran batalla futbolística. Los jugadores ya velan armas a escasas horas de saltar al campo. Los veteranos querrán revivir las tardes de derbi de otrora y los aficionados cuentan los minutos para disfrutar del derbi leonés.