Borrar
La excapitana del equipo nacional afgano, Khadila Popal, con su nueva camiseta.
Una prenda para reivindicarlas a todas
FÚTBOL femenino

Una prenda para reivindicarlas a todas

La selección de Afganistán presenta su nueva camiseta con hiyab

Daniel Cabornero

Martes, 8 de marzo 2016, 22:01

Necesitas ser registrado para acceder a esta funcionalidad.

Compartir

Con motivo del Día Internacional de la Mujer, declarado oficialmente en 1975 por la ONU para cada 8 de marzo, la Federación de Fútbol de Afganistán ha presentado la nueva camiseta de su selección nacional femenina y que incluye un hiyab en algunos de sus modelos.

Esta innovadora indumentaria, diseñada por la marca de ropa Hummel y que será lanzada simultáneamente con la del equipo masculino, integra un hiyab que permitirá a las mujeres practicar este deporte en su país sin temor a represalias de carácter religioso.

Este velo musulmán forma parte de la camiseta base y es la primera vez que se incluye como característica estándar en una camiseta de esta índole, y además «ayuda a competir con igualdad a nivel internacional» según informó en un comunicado la propia empresa Hummel.

Para el propietario de Hummel, Christian Stadil, el trabajo con la Federación de Fútbol de Afganistán «es un indicativo de su compromiso continuo para dar a los más necesitados una posición de victoria» en un mundo desequilibrado. «Nosotros no patrocinamos a los equipos más grandes del mundo, pero realizamos alianzas con equipos y clubes con una historia que contar», dijo.

Pese a la polémica que podría suscitar entre puristas musulmanes, Stadil mostró firmeza por la decisión de su empresa. «Tratamos de cumplir con el pueblo afgano y con su situación, y en este momento es ayudando a las mujeres que juegan al fútbol con o sin un hiyab», comentó al respecto.

La FIFA sancionó al equipo iraní por sus hiyabs

La indumentaria afgana podría, en cambio, no sentar bien en las altas esferas de la FIFA. Porque el ente encargado de administrar el fútbol a nivel planetario excluyó a la selección iraní, precisamente por llevar hiyab, durante la fase de clasificación para los Juegos Olímpicos de Londres 2012.

«Esta camiseta te hace sentir poderosa»

  • «Para un país como Afganistán, lucir la camiseta de la selección es como un poder, una forma de fomentar la confianza en la mujer. Eso te hace sentir poderosa», aseguró la excapitana del equipo nacional femenino, Khadila Popal.

  • Popal jugó más de 20 partidos con su país antes de que una lesión en la rodilla propiciara su retirada «Fue un gran honor ser capitana del equipo de mi país, pero fue un honor aún mayor ser vista como un modelo a seguir y una inspiración para miles de niñas y mujeres jóvenes en Afganistán», expresó.

  • «La selección femenina de Afganistán muestra el enorme potencial que tiene el fútbol como fuerza unificadora. Quiero pensar que hemos dado una nueva esperanza a una gran cantidad de mujeres en nuestro país», concluyó la excapitana.

Mientras solían competir con un chándal blanco y un pañuelo que cubría cabeza y orejas, a las iraníes se les prohibió jugar un partido vital ante Jordania. Informado pocos minutos antes del inicio, el equipo se enfundaba un uniforme que al parecer infringía normas de vestimenta impuestas por la propia FIFA. Tras la prohibición del encuentro y la consiguiente suspensión, la FIFA dio por perdido el encuentro a Irán por 3-0 y concedió los tres puntos a Jordania.

La controversia generó un intenso debate a diferentes niveles. Cristina Avellán, joven alicantina que dirigiera la selección iraní de fútbol sala en 2007, apoyaba a las jugadoras y reconocía que «el velo es parte de su cuerpo». Ya en 2006, la selección femenina de Irán fue descalificada de los Juegos Olímpicos de la Juventud por el mismo motivo.

Precedentes en atletismo

El uso del hiyab no es algo nuevo en el mundo del deporte, siempre sensible a cualquier reivindicación política o religiosa. Por ejemplo, la palestina Woroud Sawalha cumplió en marzo de 2012 su sueño de competir en un Mundial de atletismo embutida en un hiyab negro. Disputó la primera serie de los 800 metros, fue doblada por todas sus rivales y firmó un registro de 2:51:87, su mejor marca personal, para así llegar a la meta a más de 51 segundos de la ganadora.

No era tampoco la primera atleta que saltaba a la pista con una indumentaria similar. En la retina de los aficionados al atletismo está la imagen de Rakia Al Gassra, de Baréin, que compitió así en los 100 metros lisos de los Juegos Olímpicos de Atenas 2004 y aprovechando que estos hiyabs se confeccionan con tejidos transpirables de última generación.

En la edición olímpica anterior (Sídney 2000), la australiana Cathy Freeman impactó al mundo con un maillot de cuerpo entero. Tras haber encendido el pebetero durante la ceremonia inaugural, Freeman ganó con la cabeza semicubierta el oro en los 400 metros. Ante el delirio del público local, ella dio una vuelta de honor con la bandera australiana en una mano y un estandarte aborigen en la otra, lo cual en teoría estaba prohibido por el COI al no ser bandera nacional ni estar reconocida por sus directivos.

Reporta un error en esta noticia

* Campos obligatorios