La Pizarra de Ramón: Igualdad

Le animo a que eche un vistazo a la clasificación del grupo primero de la 1ª RFEF, si no lo ha hecho ya, y observe todo lo que hay en juego a falta tan solo de una jornada. Por arriba, el campeón que lleva a la segunda división se dirime entre el Racing de Ferrol y el Alcorcón como locales.

Para el quinto puesto que da acceso a playoff, Celta B y Linares se lo disputan, con los gallegos visitando a Malata. La Copa del Rey, parece que aún tiene opciones el Mérida de alcanzar a Unionistas. Y por abajo, desde el puesto décimo, ocupado por la Cultu que partirá primera en la parrilla de la mini carrera por la permanencia, hasta el décimo octavo pelearán por evitar las últimas 3 plazas que llevan a la segunda federación. Lo curioso es que excepto el Ceuta-Linense, no hay duelos directos en esta lucha por no descender.

Solo Dépor y Castilla (en liza ser terceros o cuartos), Córdoba (tras inicio fulgurante, segunda vuelta que le aleja de cualquier objetivo), y Talavera y Pontevedra ya descendidos, afrontan los 3 puntos del próximo sábado 27 sin ninguna exigencia. Con estos datos solo trato de que los traslade al juego, al césped, a los partidos de estas últimas jornadas, aunque yo le haya repetido que es más regular desde que dio comienzo la segunda vuelta.

Es un reflejo, esta igualdad, de lo poco abiertos que son, de la dificultad para encontrar jugadas elaboradas en ataque con asiduidad. Incluso semejanza en dibujo y patrones defensivos. Celta y Castilla se han salido durante toda la temporada de la clásica línea de 4 defensas, el resto, en determinados momentos, y en situaciones específicas de partido. Por delante mayoría de opciones con dos medios centro, dos jugadores de banda, y media punta junto a delantero.

Ayer en el Municipal Reina Sofía detectaría todo esto. Ambos conjuntos con ese esquema sin balón. Primero presionando arriba reinicio rival, que provocaba golpeos sobre delanteros (con buena estatura por los dos lados), y trabajar desde segunda jugada. Si poseía ya esférico el contrario, repliegue medio-bajo con líneas muy juntas, y hombres de mismas líneas cerca, facilitando las ayudas. Traducción, escasas oportunidades de gol. El primer disparo a puerta se produjo en el 39 por una falta directa de Alarcón.

Y con balón no correr riesgos. Me va a llamar pesado, pero hace tanto tiempo que le vengo diciendo la importancia que dan los cuerpos técnicos a no cometer errores, aprovechar los del contrario, y apostar por el balón parado. Curiosamente los dos caminos que llevaron ayer a conseguir los dos goles por parte de Unionistas.

Dentro de esta tesitura el plan del medio centro varía. Muy acostumbrados en el fútbol actual a ser el iniciador de la creación de ataque, ahora pasa por ser un captador de segunda jugada. En contadas ocasiones pierde altura junto a centrales para dar claridad, pero por lo comentado en el anterior texto, y esa verticalidad asumida por evitación de riesgos, este hecho, el de ayudar a centrales, se limita, y se pasa a detectar posiciones o mejor dicho, espacios donde pueda caer cualquier despeje o dejada de los compañeros atacantes.

Cuando se tiene posesión, por dentro ya no hay pases fáciles, y si hay o se consiguen conquistar esas zonas, llegan las ayudas defensivas, provocando pérdidas o mucha imprecisión en la continuidad.

Por lo tanto el camino debe ser por fuera, pero en primera instancia siempre va estar protegido el carril fuerte, y se hace necesaria una circulación y llevar lado contrario. Y vuelve a repetirse la complicación de liberar situaciones ventajosas debido al menor esfuerzo ofensivo y mayor implicación y trabajo defensivo. En definitiva, partidos ásperos para el aficionado.

Quería destacarle este aspecto que no hace otra cosa que refrendar todo lo anteriormente expuesto.

En ese momento de posesión de un equipo, cuando es capaz de mover y profundizar por un costado, normalmente finaliza en centro sin éxito en remate, o en pases hacia pasillo central para posible tiro.

Ayer se dieron cerca de una decena de situaciones protagonizadas por ambos equipos donde tras esa segunda jugada o ese pase interior, se producía una opción de tiro o remate, casi siempre sobre rondando la frontal del área. Pero este no tenía éxito. Y no tenía éxito por la mucha población dentro del área.

Dentro de esas precauciones y de ese miedo a encajar, se acumulan muchos efectivos cerca de portería para proteger. Estas interceptaciones podríamos asemejarlas a tapones en baloncesto, cuando el atacante ya está con opción para anotar y llega el defensor para evitarlo.

Sobre el minuto 21 de la primera parte llegó la circulación más clara de la Cultu, con apoyo intermedio de Niko que aclaró ataque por pasillo exterior donde Percan con verticalidad finaliza en centro rematado por Alarcón, y taponado por el defensor.

A todo ese número de defensores dentro de área, súmele la ansiedad del atacante, que le hace acelerar la acción. Es decir, muchas veces un recorte, amago o simple control, provoca el engaño en el rival, y posibilidad de rematar sin oposición. Pero todo ello es fruto del momento.

Le quiero escribir dos párrafos sobre la importancia del jugador ruso en el ataque leonés, ya sea como soporte o como finalizador.

Ahora hay mucho análisis trasladado a estadísticas que disecciona cualquier acción del juego, y más concretamente en los atacantes, su papel en todo lo que ejecuta el equipo en campo rival. Desde goles y asistencias, a pases clave, pases que favorecen ataque, remates…

Niko limpia el juego ofensivo en un alto porcentaje. No puede participar, lógicamente, en salida, pero desde ahí aparece. En juego directo, con dejadas o protección o prolongaciones. En juego por bajo, descargando, apareciendo en diagonal alejando a central de área, y siempre con un criterio claro de continuidad. Y si no, poblando y apareciendo en área para remate.

Si aparece más bajo, se despobla el área, y si está en área, desaparece una gran opción para progresión de juego.

Para acabar haga un ejercicio de imaginación para simular lo que sucederá el próximo sábado, durante 90 y algunos minutos más, como si fuera una carrera al sprint que tan de moda están en los Grandes Premios de Fórmula 1 o de Motos. Y le invito a agarrarse, como hago yo a 3 datos:

- La Cultu parte primera en la salida.

- La Cultu juega contra el último clasificado (tomémoslo como dato positivo), ya descendido.

- Con un punto se lograría la permanencia.

Y súmele el ambiente del último partido como local del equipo, con un público animosos desde el primer minuto, sabedor de lo que hay en juego. Ambiente necesario y que sin duda la afición llevará a cabo.

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