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El director de la Fundación Villalar-Castilla y León, Juan Zapatero (I), y el miembro del Comité Consultivo, Luis Grau (D), presentan, junto al artista Yago Ferreiro (C), el proyecto ‘Kintsugi. Trabajos de desamor perdidos’.
La Fundación Villalar premia el proyecto leonés 'Kintsugi' entre 27 ideas presentadas en León

La Fundación Villalar premia el proyecto leonés 'Kintsugi' entre 27 ideas presentadas en León

Yago Ferreiro, autor de dicha idea, explica que se trata de un proyecto que mezcla «literatura, artes plásticas y expositivas» y será algo «de lo que no quede registro» | Se han presentado 237 iniciativas en todo Castilla y León y el jurado destaca la «gran calidad» de todos los proyectos

dani gonzález

Miércoles, 1 de febrero 2017, 14:40

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El 'kintsugi' es un arte japonés de restauración de piezas con oro. Esta técnica ha sido el origen de la idea de Yago Ferreiro, propietario del Bar Belmondo, para su proyecto 'Kintsugi. Trabajos de desamor perdidos' que ha sido becado por la Fundación Villalar para que desarrolle su idea durante un año.

El proyecto de Ferreiro es uno de los 237 presentados en toda la Comunidad Autónoma y uno de los 27 con sello leonés. Solo una iniciativa por provincia iba a ser la premiada, y 'Kintsugi' se impuso a otros proyectos. El jurado, representado por Luis Grau, director del Museo de León, destaca «el alto nivel en cuanto a cantidad y calidad de los proyectos». «Ha sido una decisión difícil pero satisfactoria. Hubo cuatro finalistas, cuatro proyectos que pelearon hasta el final. Pero esta idea es original y difícil de encuadrar en una de las materias artísticas tradicionales», explica.

Yago Ferreiro señala que su proyecto aúna literatura, artes plásticas y expositivas y se desarrolla en tres fases. La primera trata de un manuscrito con tinte deleble, es decir, que desaparece con el contacto con el aire. «Tienes un número determinado de días para leerlo», señala. La segunda fase es la expositiva en la que, usando la técnica del kintsugi, se tratan de recuperar los objetos que aparecen en la primera parte. Por último, en la última etapa se utiliza una aplicación informática para «replicar el manuscrito», que luego desaparecerá. «Dentro de un año, no quedarán registros de esta obra», añade.

El presidente de la Fundación Villalar, Juan Zapatero, destaca la «gran cantidad de talento» que hay en Castilla y León en una convocatoria que considera «un éxito de participación y calidad». «Estoy seguro de que los proyectos seleccionados responderán a las exigencias de nivel y que repercuta en el futuro para que estas becas continúen. Queremos que tengan sentido en sí mismas», sentencia.

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