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El kilómetro cero de la recuperación es el producto local

Toca ayudar a quienes no han dejado de ayudarnos. El consumo de productos locales es la respuesta

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Ana García Novo

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No hace tanto tiempo de aquello de la España Vaciada. Esa expresión que escuchábamos semana sí, semana también para referirnos a esas zonas del país en las que la despoblación y sus consecuencias campaban a sus anchas, parece que ha desaparecido por completo. La culpa es de la pandemia de la COVID-19, que lo ocupa todo: los espacios informativos, nuestras preocupaciones cotidianas e incluso nuestras proyecciones de futuro.

Sin embargo, esa España sigue ahí. Y, lo que es más importante, va a seguir ahí cuando la polvareda de la emergencia sanitaria acabe por posarse. Sus problemas estructurales continuarán y corren riesgo de agravarse debido a un panorama económico complicado.

Por fortuna, esa parte de España cuenta con una importante línea de defensa: los productores locales. Esos que, en su día, dijeron “Yo me quedo” serán los cimientos sobre los que las economías rurales se levantarán de una crisis tan inesperada como profunda. Eso sí, para que lo consigan, es imprescindible que todos arrimemos el hombro.

Un sector que no ha parado

Mientras casi toda España se confinaba en sus domicilios para frenar la pandemia, miles de pequeños productores de áreas rurales siguieron al pie del cañón para que no faltara nada en los hogares. Actividades como la agricultura, la ganadería o la fabricación de aceites y productos lácteos, entre otras muy comunes en esas áreas, han sido consideradas actividades esenciales durante el estado de alarma. Eso significa que los productores que están detrás de esas actividades no han parado ni un momento para que el resto de los ciudadanos pudiera hacerlo.

Lo han hecho contra viento y marea: ni las escasas infraestructuras, ni la carencia de mano de obra en muchos casos les han impedido seguir llenando nuestras despensas. No solo eso: también han seguido cuidando del entorno natural y manteniendo puestos de trabajo en zonas en las que suelen escasear.

Ahora, cuando comienzan a relajarse las medidas adoptadas durante el estado de alarma, los productores locales seguirán al pie del cañón. Apoyarles para que continúen adelante no solo es una cuestión de justicia. Además, es lo más inteligente que podemos hacer. Al menos así lo considera la Organización Internacional del Trabajo, que subraya el potencial de la economía rural para crear empleos de calidad, así como para contribuir al desarrollo sostenible y el crecimiento económico mundial.

Consumo responsable e internet, la fórmula perfecta

¿Cómo pueden los ciudadanos ayudar a quienes tanto les han apoyado en los momentos más duros del confinamiento? El consumo responsable, que apuesta por los productos locales, es la respuesta. E internet, la herramienta que necesitan.

El objetivo de Correos Market es que ningún productor local se quede sin poder vender sus productos

Las restricciones a la movilidad nos han puesto difícil a todos acceder a esos quesos, aceites o embutidos deliciosos procedentes de lugares remotos dentro de la geografía española. También al resto de productos que elaboran artesanos de todo el país. Darles salida es más sencillo si consumidores y productores tienen un espacio común en el que encontrarse, sin restricciones. Correos se lo facilita a ambos con la iniciativa Correos Market, cuyo objetivo principal es que ningún productor local, por aislado que se encuentre, se quede sin poder vender sus productos.

Se trata de una plataforma online que permite a los ciudadanos comprar productos locales cómodamente desde sus casas, sin necesidad de desplazarse ni de establecer citas previas en las fases iniciales de desescalada. A los empresarios rurales, por su parte, les ofrece la oportunidad de darse a conocer entre los consumidores y acceder a todo el potencial logístico de Correos para hacerles llegar sus envíos.

Apostar por este tipo de consumo ayudará a fijar el tejido productivo en las zonas rurales. Esto es esencial para asegurarnos de que la recuperación económica que habrá que construir tras la crisis sanitaria sea inclusiva y sostenible. Por eso, tras llevar mascarillas a hospitales, comida a los más vulnerables y participar en más de 450 iniciativas solidarias, desde Correos proponen ahora apoyar a quienes han estado al pie del cañón todo el tiempo. Que para eso estamos.

Producto local contra la despoblación rural

Correos Market comenzó a funcionar en 2019 como consecuencia del compromiso de Correos con la sociedad, concretamente para afrontar el reto demográfico que plantea el ámbito rural. Un espíritu que hoy cobra más interés que nunca, dada la fragilidad económica que acarrea la pandemia de la COVID-19 y que puede afectar en mayor medida a áreas ya anteriormente castigadas.

Actualmente, la plataforma cuenta con 350 productores activos y ofrece más de 2.500 productos. Todos ellos están respaldados por el propio certificado de calidad y producción de Correos, que acredita la responsabilidad social de los productores, junto a otros aspectos como el empleo de códigos de buenas prácticas en los procesos, el fomento del uso de materiales naturales o el origen de los productos.

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Este contenido ha sido desarrollado por Content Factory, la unidad de contenidos de marca de Vocento, con Correos. En su elaboración no ha intervenido la redacción de este medio.