Portugal y Castilla y León, hermanos, no sólo por el Duero

Los lazos de unión históricos entre ambos territorios se traducen en compartir algo más que un río, el Duero, eje vertebrador de Castilla y León y de todo el norte luso, en torno al cual se elaboran algunos de los mejores vinos del mundo y se utiliza como atractivo turístico a ambos lados de la frontera. Portugal y la Comunidad cuentan con casi idéntica superficie, 92.212 kilómetros cuadrados del país vecino, por 94.226 que suman las nueve provincias.

No obstante, frente a los más de 10,2 millones de portugueses del estado que preside Marcelo Rebelo de Sousa, Castilla y León no alcanza los 2,5 millones, lo que deja una amplia diferencia en la densidad de población, 112 habitantes por kilómetros cuadrado frente a 25,7. La dispersión es mayor en la Comunidad. Sin embargo, tienen otro punto en común, el envejecimiento: la República contabiliza 2,21 millones de personas mayores de 65 años, un 21,5 por ciento de su población, y Castilla y León, 603.000, una cuarta parte. Por si fuera poco, un 12 por ciento tiene menos de 15 años en la Comunidad (291.425), solo dos puntos menos del peso de este colectivo de edad en Portugal, un 13,8 por ciento (1,42 millones), según se extrae de los institutos nacionales de Estadística de España y Portugal.

En general, en el capítulo demográfico, ambos territorios se asemejan y refuerzan sus lazos. Así sucede también con la tasa de natalidad, del 6,82 por ciento en Castilla y León y del 8,4 en el estado luso, con casi 15.000 y 86.000 nacimientos el pasado año, respectivamente. La tasa de mortalidad tampoco difiere mucho, 11,63 y 10,6 por ciento, mientras que Castilla y León cuenta con una nupcialidad más consolidada, con el 6,18 por ciento (7.581 matrimonios), el doble que en Portugal, que registra un 3,1 por ciento (con 32.000 de cifra absoluta).

En las cifras totales ambos territorios son diferentes, pues se compara un país con una Comunidad Autónoma, y el PIB de Castilla y León ronda los 60.000 millones de euros, cuando Portugal alcanza los 194.614. Mientras que si el análisis es per cápita, la región se eleva hasta los 23.555 euros, por 18.900 de nuestros vecinos.

Sin embargo, cuentan con una estructura por sectores muy similar. Los servicios tiran de la economía en los dos territorios. Su peso en Castilla y León es del 69,2 por ciento, según datos del segundo trimestre, incluso más bajo que en Portugal, donde se sitúa en el 75,27 por ciento. Es decir, tres de cada cuatro euros procede de los servicios. Los porcentajes no han variado en cantidad en los últimos años. La segunda rama con mayor relevancia es la industria, con el 20,9 por ciento en la Comunidad y el 18,4 portugués; mientras que la construcción tiene un peso del 6,7 y el 4,08 por ciento, respectivamente, y la agricultura, del 3,2 y del 2,2.

En cuanto a los salarios, en ambos casos son menores que la media de España. De los 21.551 euros de media en la Comunidad, según el INE, a los 17.993 de Portugal, según el departamento de Estadística de este país. Con una tasa de paro del 6,7 por ciento, el estado luso se encuentra entre los más bajos de la UE, no falta de polémica por parte de ciertos lobbies que acusan al Ejecutivo de Lisboa de falsear estas cifras. En Castilla y León se encuentra en el 11,3 por ciento, con una actividad del 54,88 por ciento, casi idéntica al 55,4 de vecino lusófono. Sin embargo, la Comunidad cuenta con una inflación del 2,5 por ciento, superior al uno por ciento portugués.

Tanto Castilla y León como la República portuguesa viven buenos tiempos en materia de balanza económica. El último dato conocido para la Comunidad halla un récord, ya anunciado por la consejera de Economía y Hacienda, Pilar del Olmo, de 11.057 millones de euros para las exportaciones, un 1,5 por ciento más, entre enero y agosto; y de 9.174, un 2,9 por ciento de incremento, para las importaciones. En Portugal, en el tercer trimestre ambos capítulos crecieron más del doble que en la Comunidad: un 6,1 y un 7,3 por ciento, respectivamente, con 14.000 y 18.260 millones de euros de valor.

El análisis de variables difiere bastante, por ejemplo, en el número de alumnos universitarios, que alcanzó los 71.204 en el curso anterior en Castilla y León, mientras que las enseñanzas superiores en el país vecino ocuparon a 326.000 personas, en datos de 2015. En la Comunidad se registraron 30,75 camas hospitalarias por cada 10.000 habitantes, frente a 33,7 de la estadística que ofrece Lisboa; mientras que el porcentaje de hogares conectados a internet es del 83,7 por ciento en la media de las nueve provincias, frente al 76,9 de Portugal, teniendo en cuenta viviendas con al menos un ocupante entre 16 y 74 años.

El Gobierno del primer ministro Antonio Costa dedicó 2.252,8 millones de euros a la inversión en I+D+i (año 2013, último disponible), por 606 millones de Castilla y León. El parque de vehículos en la Comunidad alcanza los 1,7 millones (6,6 en el país luso), que disfrutan de 2.395 millones de kilómetros de autovía, el 8,6 por ciento de peaje, frente a 7.184 kilómetros en Portugal, todos ellos en la actualidad de pago. Igualmente, el precio de la vivienda, de difícil comparativa, es de 1.045 euros el metro cuadrado en la región española, y de unos 700 euros para un inmueble de tres habitaciones en una ciudad media, a caballo entre una gran capital y el medio rural (según datos INE portugués).

Por último, el precio de la vida en el día a día, que se mide habitualmente con el coste de determinados, evidencia que es más barato en Portugal que en Castilla y León. Mientras una barra de pan tiene un valor para el público de 0,7 euros de media en la Comunidad, en el país luso se queda ligeramente por debajo, 0,66; el periódico, aunque varía en función del rotativo, tiene un coste de 1,5 frente a 0,9 euros; mientras que el café servido en barra de bar, es casi el doble en Castilla y León, 1,1 frente a 0,6 euros.