Pontvianne destaca que en los dos últimos años EFCL «ha intensificado y consolidado» su participación y diálogo con las administraciones

El presidente saliente de Empresa Familiar de Castilla y León (EFCL), César Pontvianne, destacó que en los dos últimos años, los de su mandato, se «ha intensificado y consolidado» la participación y diálogo de la entidad con las administraciones. «Somos actor fundamental en acciones económicas del Gobierno, nos consulta y formamos parte de ellas», defendió. Fruto de ello, dijo, es el Plan de Crecimiento firmado hace unos meses con el presidente de la Junta, Alfonso Fernández Mañueco, presente en el cierre de la asamblea telemática de EFCL, celebrada esta tarde y que nombró presidenta a Rocío Hervella.

El empresario salmantino (Plásticos Durex) se mostró convencido de que la de Castilla y León es la «mejor asociación» de empresa familiar de España. «No solo es un colectivo con fines comunes, tiene alma propia, integrado por personas que llevamos a gala ser empresarios, con inquietudes, desvelos y sentido del deber; y lo más importante, que aporta a la sociedad riqueza, bienestar y genera estabilidad». «Ese alma es el motor que genera alianzas, sinergias, sentimiento e ideas», comentó.

Pontvianne destacó el proyecto 'Empresa familiar en las aulas', exportado y reconocido por el Instituto para la Empresa Familiar. Pero en el «debe» se lleva la Formación Profesional, «luchando contra una gran lacra en España y en la Comunidad, la falta de formación en mandos medios».

Igualmente, señaló que «nunca» pudo sospechar que al final de su mandato «esperaba una crisis como la actual, una pandemia mundial que debe hacer recapacitar». «He pensado mucho sobre lo efímero y cómo el trabajo de décadas se puede desmoronar en pocas semanas», reflexionó.

En este punto, comparó la «unión de verdad» que ejemplifican los empresarios familiares con la que «se empieza a intuir que era ficticia y que han protagonizado quienes no parecen haberse enterado de nada, quienes crean bandos, dividen e inventan entre buenos y malos solo con un objetivo propio, su beneficio, sin importarles en absoluto el bien común para para el que fueron elegidos», en referencia también a la clase política

«Pero nosotros somos empresarios, tenemos iniciativas, sabemos que la unión de verdad, la nuestra, hace la fuerza y garantiza el futuro. Estos días he sentido muy de cerca lo importante que es un tejido industrial fuerte y lo que aporta a un gran país» Nuestros hijos esperan que ganemos el futuro. Tomemos el ejemplo de nuestros padres», concluyó Pontvianne, quien deseó lo mejor a Hervella, de la que subrayó su «fuerza, tenacidad y entrega con la que siempre haces las cosas». «El momento es muy duro, pero nos tienes a los 163 asociados. Somos tu guardia y vamos todos a una. EFCL nos necesita y la sociedad en general de verdad nos necesita; y como creemos en ello, no fallaremos», se despidió.