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Tradicional romería de San Froilán en La Virgen del Camino. S. Santos

La tradición y el folclore se citan en la romería de pendones y carros de San Froilán en la Virgen del Camino

Miles de personas se citan en la localidad del alfoz para disfrutar del hermoso desfile de carros y pendones, encomendarse a San Froilán y cumplir fielmente a las tradiciones que marca el 5 de octubre

A.C.

León

Sábado, 5 de octubre 2019

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Pendones, carros, avellanas, devoción, folclore, tradiciones… San Froilán, la fiesta por antonomasia de León, asomó sus narices. Y lo hizo con un gran éxito de participación en La Virgen del Camino que, como manda la tradición cada 5 de octubre, ha exhibido este sábado sus mejores galas en su día grande.

Fieles a la tradición, cientos de personas han peregrinado hasta el santuario de la Virgen por fervor, en cumplimiento a una promesa o simplemente para celebrar esta tradicional fiestas y disfrutar de un espectáculo único.

Al son de las panderetas y las dulzainas y haciendo gala de equilibrios casi imposibles, los mozos han bailado los emblemas de los concejos leoneses, uno de los patrimonio históricos y culturales más importantes de la provincia, durante su recorrido en un desfile que ha reunido a más de 250 pendones.

Junto a ellos, los carros engalanados, santo y seña de San Froilán, que han vuelto a lucir sus mejores galas y un guiño a ese pasado leonés marcada por la labranza y las labores en el campo.

Tradición e historia a los pies de la basílica de La Virgen que del Camino, donde como un goteo incesante, cientos romeros se han ido acercando hasta el patrono de la diócesis para cumplir con una de las tradiciones más arraigadas de esta festividad.

Como Ni colas, ni esperas. Nada importa, hoy es el día de tocarle la nariz al Santo en la Puerta de San Froilán y besar el manto de la Virgen del Camino.

El buen tiempo permitió que la explanada del santuario volviese a convertirse un año más en el escenario elegido para celebrar la tradicional eucarística donde se han dado cita autoridades religiosas, civiles y militares, junto con los representantes de los ayuntamientos del voto.

Un solemne encuentro que ha arrancado con la tradicional ofrenda al santo donde, a las flores y a los productos de la huerta, en representación a los colores de la tierra y al esfuerzo y el esmero de sus gentes, se ha sumado la tradicional cuelga de rosillas y una jota para simbolizar la alegría de los leoneses.

Jornada de devoción pero, ante todo, de tradiciones, donde no han faltado ni las rosquillas y las avellanas de San Froilán, ésas que dicen te quitan los pecados y que antiguamente los mozos se las regalaban a sus novias para pedirlas perdón. Un día, el de San Froilán, para disfrutar en León y honrar a su patrón.

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