EL ROSAL, MÁS 'VERDE'

Al respecto, la certificación, desarrollada por la organización BRE Global del Reino Unido, consiste en un procedimiento de evaluación del rendimiento medioambiental y la certificación de edificios sostenibles. Este sistema mejora la flexibilidad y vida útil de los edificios, incrementa su funcionalidad y el valor del inmueble construido bajo sus parámetros. En ese sentido, los certificados identifican y premian aquellas medidas que mejoran el bienestar y contribuyen a la protección del medio ambiente.

Para obtener la certificación, los responsables de BRE Global evalúan las distintas características de los edificios en distintas fases de desarrollo, desde el diseño y la construcción, hasta el mantenimiento, acondicionamiento y restauración del mismo. Con ello, se busca cumplir con cuatro objetivos específicos: reducir los impactos generales del urbanismo, reconocer los proyectos y comunidades que ofrecen beneficios ambientales, proporcionar una etiqueta creíble para el urbanismo sostenible y estimular la demanda y el desarrollo efectivo de comunidades sostenibles.