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Última sesión del juicio del crimen de Roberto Larralde.
Finaliza el juicio por el crimen de Roberto con los cinco acusados clamando su inocencia y apuntando más sospechosos

Finaliza el juicio por el crimen de Roberto con los cinco acusados clamando su inocencia y apuntando más sospechosos

El presunto autor material jura por sus hijos que jamás le mató mientras la viuda del exboxeador se ratifica en sus declaraciones | El presunto cabecilla niega que ordenase el crimen y su trabajador asegura que miente

leonoticias

Sábado, 25 de febrero 2017, 11:13

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El último turno de palabra de los siete implicados en el crimen de Roberto Larralde ha dado por concluida una vista oral que arrancó el pasado 24 de enero y que se cerrará tras la lectura del objeto del veredicto por el tribunal jurado, que se le hará entrega el próximo miércoles.

Una vista oral en la que uno a uno, los siete implicados han reiterado su inocencia, negando su participación en el hecho que se enjuicia. El primero en hacer uso de su turno fue José Ramón Vega, el presunto verdugo, que remarcó en reiteradas ocasiones que no mató a Roberto Larralde.

«Lo juro por la vida de mis hijos. Roberto era mi amigo y yo no mato ni he matado nunca a nadie al contrario de lo que se quiere hacer ver. Nunca he estado involucrado en ningún delito de apuñalar a alguien ni de matar a nadie. Siento mucho la muerte de Roberto».

Inocencia que también defendió Julio López, presunto cabecilla del plan para matar al exboxeador leonés, que señaló que nunca ordenó ni a Ramón ni a nadie matar o hacerle algo a Roberto. «Ahí están las declaraciones de todos».

Posibles culpables

Más extensa fue la intervención de Froilán Álvarez Silvano, el detective privado que supuestamente asesoró a Julio, que, además de apuntar a los «muchos malentendidos» que se han visto durante la celebración del juicio «sin que nada tengan que ver con la muerte de Roberto», aseguró que la investigación fue incompleta. «Quedaron muchas cosas por hacer, no fue una investigación exacta».

Entre ellas, según remarcó, una reconstrucción de los hechos «se hace en la mayoría de los casos, como el del asesinato de la peregrina. Y no se ha hecho una reconstrucción ni del viaje ni del crimen». Además, el detective apuntó que tampoco se tuvo en cuenta el pasado de la víctima para demostrar si hay alguna persona que pudiera tener interés ejercer una venganza o represalia.

Así por ejemplo, el letrado recordó que Roberto estaba implicado junto a su primo en un crimen en el que su inocencia se basaba en involucrar a su tía y también apuntó a la posible participación de la última persona con la que habló en vida Roberto, un trabajador con el que mantenía «rencillas» por haber sufrido un accidente sin haber estado asegurado.

Últimas palabras

  • Julio López Yo no mandé matar a Roberto Larralde ni hacerle nada. Ahí están todas las declaraciones de todos. Gracias por su atención.

  • José Ramón Vega Roberto era mi amigo y yo no le maté. Lo juro por la vida de mis hijos. Era mi amigo y yo no mato ni he matado nunca a nadie al contrario de lo que se quiere hacer ver. Siento mucho la muerte de Roberto.

  • Froilán Álvarez Silvano Aquí se han visto muchos malentendidos que nada tienen que ver con el crimen además la investigación no ha sido una chapuza pero si ha sido incompleta, con cosas sin hacer. No ha habido una reconstrucción de los hechos y tampoco se ha tenido en cuenta el pasado de la víctima para ver si hay alguna persona que pudiera tener algún interés en tener un tipo de venganza o represalia.

  • Carlos Heli de la Red Creo que he sido un buen obrero en la empresa. Desde el primer día hasta hoy mis declaraciones siempre han sido las mismas. Yo no he hecho nada. Tengo las manos limpias y la conciencia muy tranquila. Yo creo que mi jefe miente. Creo que miente con todo.

  • Miriam Caballero Me reitero en todas mis declaraciones y en todas las preguntas a las que he respuesta.

  • Antonio Gabarri Nunca supe nada del plan de matar a Roberto. Roberto era un gran amigo mío. Yo solo vendía la pistola por la adicción a la cocaína. Pedirle disculpas a la familia porque yo no sabía nada de esto.

  • Adrián Martínez Yo entregué el arma por una deuda y era la única manera de saldarla. Es cierto que esa arma la utilicé pero sin poner en peligro la integridad física de nadie, disparando a un vehículo que estaba vacío. He cooperado desde el primer momento porque veo que es injusto esta trola de la muerte de Roberto Larralde y para que en ningún momento se pueda decir que yo tengo algo que ver.

«Cualquiera podría ser sospechoso y no se ha tenido en cuenta. Y si seguimos mirando más en el pasado tiene un historial importante aunque no hay que criminalizar a la víctima», señaló el acusado, entre reproches y gritos de «asesino» por parte de varios de los asistentes de la sala.

Conciencia tranquila

Más conciso fue Carlos Heli, trabajador de Julio López, que aseguró tener las manos limpias y la conciencia muy tranquila, remarcando que su declaración se ha mantenido en el tiempo y que siempre se ha mostrado colaborador para esclarecer los hechos también. Eso sí, ha advertido de que su jefe, el presunto cabecilla, miente. «Yo creo que mi jefe miente. Creo que miente con todo».

Miriam Caballero, viuda del exboxeador y presunta inductora del crimen, se limitó a reiterarse en todas las declaraciones hechas hasta la fecha así como a todas las preguntas a las que he respondido.

Minutos antes su letrado había echado por tierra con pruebas en la mano el testimonio de la única testigo que la inculpaba, su amiga María del Mar, que cambió de versión y a la que acusó de incurrir en falso testimonio.

Al margen del crimen

Por su parte, Antonio Gabarri, acusado de un delito de tenencia de ilícita de armas, hizo alusión a un desconocimiento absoluta del plan para matar a Roberto, que era una gran amigo mío, y recordó que su participación se limitó a vender la pistola con la que fue asesinato por mi adicción a la cocaína. Quiero pedirle disculpas a la familia porque yo no sabía nada de esto.

Una ronda que finalizó Adrián Martínez, propietario del arma, que aseguró que hizo entrega de la misma a Gabarri «por ser la única manera de saldar la deuda» y, aunque reconoció que ese arma la había utilizado con anterioridad, advirtió que nunca fue para disparar a un vehículo vacío sin poner en peligro la integridad física de nadie.

Asimismo, hizo hincapié en que «desde un primer momento» ha colaborado en la investigación «porque veo que es injusto esta trola de la muerte de Roberto Larralde. Y he cooperado para que en ningún momento se pueda decir que yo tengo algo que ver».

Objeto del veredicto

Últimas palabras que han puesto punto y final a este juicio en e que se juzga el crimen de Roberto Larralde en la noche del 13 de septiembre de 2014. Será el miércoles cuando el presidente magistrado, tras una reunión previa y a puerta cerrada con todas las partes, entregue al tribunal jurado el objeto del veredicto que determinará la culpabilidad o no de los siete acusados. Está previsto que el jurado pueda emitir un veredicto antes del próximo fin de semana

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