Juicio por el 'caso Carrasco'
JUICIO POR EL 'CASO CARRASCO'
Una testigo clave apunta a un posible manipulación del bolso con el arma
La testigo asegura que el día del crimen no había nada a los pies del asiento trasero del vehículo de la agente, lugar donde el martes halló el bolso
Imagen del bolso con el arma (izquierda) así como del arma del crimen (derecha) en el sumario.
Imagen del bolso con el arma (izquierda) así como del arma del crimen (derecha) en el sumario.
A. Cubillas / @And_Cubillas
21/11/2014 (08:50 horas)
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Nuevas pruebas en el caso del asesinato de Isabel Carrasco que incriminan con mayor contundencia a Raquel Gago. Una de las testigos habría desmontado durante las testificales la versión de la defensa apuntando a una posible manipulación del bolso que apareció en el interior del vehículo de la agente de la Policía Local de León con el arma del crimen en su interior.

Durante su declaración ante la jueza el pasado 16 de octubre -a la que ha tenido acceso leonoticias.com-, L.G.C., conocida de la imputada, recordó cómo en la tarde del 12 de mayo, apenas unas horas después del asesinato de la dirigente política, Raquel y su hermana la fueron a buscaron en su vehículo.

En ese momento, la declarante, al ver que el asiento trasero del conductor estaba lleno de garrafas de agua, accedió al vehículo por la puerta trasera al copiloto, ocupando dicho asiento sin apreciar, según reafirmó en reiteradas ocasiones, que hubiera un bolso en el suelo, el mismo lugar donde en la tarde del martes apareció el bolso con el arma que acabó con la vida de Carrasco.

Según su declaración a la que ha accedido leonoticias.com, la testigó aseguró que no vio nada a sus pies. “Del otro lado había unas garrafas y unas bolsas pero donde yo me senté no vi nada”, aseguró la conocida de Raquel Gago, que señaló que no notó nada a sus pies y que no tuvo que apartar nada con los pies.

Sorpresa por el hallazgo del bolso

Unos hechos que, según recuerda la testigo L.G.C., tuvieron lugar cuando aún había luz del día. Minutos después se bajó del coche tras acceder a la cochera de la vivienda de Raquel donde, según señala, también había luz porque estaban encendidos los puntos de luz del garaje. De ahí que L.G.C apuntase durante su testifical su sorpresa por dónde apareció el bolso.

Ya en el interior de la vivienda de la agente, L.G.C. asegura que en ningún momento la imputada hizo referencia a su encuentro con Triana. Únicamente les hizo referencia de que habían hablado por teléfono y de la había invitado a comer pero que finalmente no había podido.

En cualquier caso, la declarante trasladó a Raquel que con seguridad la policía se pondría en contacto con ella por ese último contacto que había tenido con Triana en la mañana de ese lunes.

Demonta la línea de la defensa

Posteriormente, la testigo, junto a la hermana de la agente y a una segunda amiga, se fue de la casa de Raquel que bajó con ellas en el ascensor alegando que iba a dejar algo en el que coche aunque asegura desconoce el qué.

Una declaración que desmonta la principal arma de defensa del abogado de Gago y que apunta a que el bolso podría haber sido manipulado por la agente que, en presencia de otra amiga, lo localizó al día siguiente en el mismo lugar donde había estado la testigo, que reiteró en varias ocasiones durante su último testifical que no había visto objeto alguno.

El testifical de L.G.C. fue solicitada y rechazada posteriormente por el letrado de la agente, Fermín Guerrero, aunque finalmente la testigo prestó declaración a petición de la jueza al entender que su testimonio podría ser clave, como así parece ser que ha sido, para valorar el grado de implicación de Raquel en el asesinato de Isabel Carrasco
 

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