Los equipos de ingeniería de Renault en Valladolid no han ahorrado en fórmulas para evitar que quienes puedan contemplar el paso del prototipo puedan hacerse una idea clara de las características y la fisonomía del modelo, pero la instantánea permite hacerse una idea de las formas más básicas del nuevo coche palentino, que compartirá líneas de fabricación con el Mégane IIIdurante este año y con el futuro Mégane IVa partir de 2016, según confirmaron fuentes de la compañía la semana pasada.
Prototipos como el fotografiado ayer han recorrido en varias ocasiones las carreteras situadas en las cercanías de las instalaciones de las Direcciones Centrales de Renault en Valladolid, en la carretera de Madrid, donde están los departamentos de ingeniería. «Lo vi en las cercanías de las plantas de Renault, iba en la misma dirección que yo y pude fijarme en su extraño aspecto. Aproveché una rotonda con un ceda el paso para detenerme y fotografiarlo mejor», explicó el joven Arias Páez, quien aseguró que «es la primera vez que tengo la ocasión de fotografiar algo así, pero en Zaragoza, donde he residido algún tiempo, también he visto algún coche con camuflaje», comentó.
La ‘caza’ de prototipos resulta cada vez más habitual y que millones de ciudadanos porten ahora una cámara fotografica en su teléfono móvil de mejores prestaciones que la más aventajada de un profesional de hace cinco años dificulta a los equipos de ingeniería las pruebas de carretera con la suficiente discreción de miradas que pueden ser de expertos de la competencia o, como en esta ocasión, simplemente curiosas.