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Rajoy reivindica en la cuna de Suárez el consenso en los "grandes retos" 
El candidato del PP a la reelección fija en Ávila cuatro grandes objetivos: crear empleo, atender a las personas en los servicios públicos, la defensa de la unidad de España y el respeto a la ley
El candidato del PP a la Presidencia del Gobierno, Mariano Rajoy, y el presidente del PP de Castilla y León, Juan Vicente Herrera, participan en un acto de la campaña electoral en Ávila con la intervención del hijo del expresidente Adolfo Suárez. (Foto: R
El candidato del PP a la Presidencia del Gobierno, Mariano Rajoy, y el presidente del PP de Castilla y León, Juan Vicente Herrera, participan en un acto de la campaña electoral en Ávila con la intervención del hijo del expresidente Adolfo Suárez. (Foto: R
leonoticias.com
04/12/2015 (12:45 horas)
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El presidente del PP y candidato a la Presidencia del Gobierno, Mariano Rajoy, reivindicó hoy en la cuna de Adolfo Suárez la política del acuerdo en los “grandes retos” nacionales desde la convicción de su partido en la moderación, la tolerancia y el diálogo y fijó cuatro grandes objetivos para la próxima legislatura: la creación de empleo, cuidar a las personas, la defensa de la unidad de España y el respeto de la ley, como la Constitución.

En el primer día de campaña, Rajoy eligió la ciudad de Ávila, donde llegó acompañado por Adolfo Suárez Illana, en un acto simbólico de reconocimiento de la figura del primer presidente de la democracia, el abulense Adolfo Suárez, a quien  definió como un “hombre de Estado y un patriota, que supo conciliar sus convicciones con la política de la tolerancia y el diálogo”.

Durante una breve intervención en la Plaza Adolfo Suárez y al lado de la estatua en homenaje al presidente que firmó los Pactos de la Moncloa, el candidato a la reelección proclamó que, aunque “cada uno tiene sus recetas, lo importante es que en los grandes retos nacionales haya una gran mayoría, que vaya junta a la hora de fijar las normas constitucionales, defender la unidad de España y luchar contra el terrorismo”.

Hay temas muy importantes que deben unir a toda la Nación y luego está el debate sano, democrático y político de las medidas”, aseguró, convencido de que en esos “grandes acuerdos” tiene que estar la defensa de la Constitución, la igualdad de todos los españoles, la defensa de la unidad y de la soberanía nacional, la política exterior y la lucha contra el terrorismo.

Ante más de 300 personas, que siguieron la intervención en la Plaza Adolfo Suárez, en la que le jalearon con “presidente, presidente” y “bravo” en algunos de sus mensajes, Rajoy reivindicó para el futuro “esa forma de hacer política” basada en la convicción del PP y aseguró que será desde la “moderación, el espíritu de diálogo y la tolerancia”.

El candidato y presidente defendió también la Constitución española, por las “muchas cosas que ha dado”, como un periodo de progreso, derechos y libertades o la presencia de España en la Unión Europea y en los grandes foros de la política mundial, y aseguró que se puede “cambiar y adaptar”, porque se ha hecho en dos ocasiones, pero alertó de que “hay que saber muy bien lo que se va a hacer” y hacerlo con el “consenso que consiguió Adolfo Suárez en su momento”.

Cuatro objetivos

“Fijo aquí ante Adolfo Suárez hijo y ante Adolfo Suárez los cuatro objetivos para el futuro”, afirmó Rajoy, en todo momento acompañado por el hijo del expresidente. El primero de ellos es la creación de empleo, aseguró el candidato, que defendió el avance en la lucha contra el desempleo en los años 2014 y 2015 y abogó por “perseverar en las mismas políticas” con las que subrayó que se evitó el rescate de España. Al ritmo de empleo creado entre 2014 y 2015, se pueden generar dos millones, aseveró.

El segundo de los objetivos, siguió Rajoy, es atender a las personas con políticas de mejora de las pensiones, mejora de la calidad de la educación, sanidad, servicios sociales o dependencia y en “todo lo que afecta a la vida de los ciudadanos”. El candidato remarcó que todo ello será posible si se crea empleo.

“La unidad y la soberanía de España ni se toca, ni se negocia, ni se pone encima de la mesa; es de lo que dedican los españoles, no de lo que decidan una parte de los españoles”, proclamó Rajoy, en uno de los mensajes de su breve intervención más celebrado por los asistentes.

El presidente y candidato a la reelección concluyó con la proclamación de que las leyes y la Constitución están para cumplirse y enfatizó que “por encima de la ley, no hay nada”. “Se respetan, se aplican a todos los que estamos aquí y a los que no están aquí, a los gobernantes, al presidente del Gobierno y también al presidente de la Generalitat”, afirmó.

Manos expertas

Poco antes, Adolfo Suárez Illana, que tuvo una incursión en la política como candidato del PP a la Presidencia de Castilla-La Mancha, defendió que los retos que tiene España “merecen ponerse en las manos expertas” de Mariano Rajoy. El hijo del expresidente le dio las gracias porque, desde “sus aciertos y errores”, la “esperanza de hoy es distinta de la de hace cuatro años”. “Los retos actuales requieren una extraordinaria templanza, capacidad y experiencia”, afirmó.

Suárez Illana se declaró amigo de los números uno y dos de la lista del PP por Ávila, Pablo Casado y José Ramón Hernández, pero también de quien lidera la candidatura socialista por esta provincia, Pedro José Muñoz. Tras manifestar que es “bonito la discrepancia y diferencia”, desde esa amistad, se decantó por el voto para sus amigos populares. Además, manifestó que se lleva “muy bien” con Pedro Sánchez y que tiene una “buena relación” con Albert Rivera, y sin dudar de ellos afirmó que “tendrán su oportunidad en el futuro”.

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