Según informa Industria, en la reunión se planteó que Bruselas acepte algún tipo de mecanismo de ayuda a lo largo de estos años para garantizar la quema de carbón nacional por parte de las centrales térmicas con el objetivo de no poner en riesgo la seguridad de suministro.
Además, destaca que la comisaria se mostró comprensiva con los argumentos españoles, si bien supeditó cualquier tipo de ayuda a que ésta sea compatible con el régimen europeo, para lo cual siguen trabajando equipos técnicos de la Comisión Europea y del Ministerio de Industria, Energía y Turismo.
Soria argumentó que España es un país con muy pocas interconexiones con el resto de Europa, lo que significa que la seguridad de suministro energético es vulnerable y precisa fuentes autóctonas.
Bruselas no se opone a ese tipo de ayudas, pero siempre y cuando se hagan dentro de la legalidad europea. El compromiso comunitario es, por lo tanto, estudiar la posibilidad de una vía legal que permita a España cierta compensación a la quema del carbón nacional hasta el año 2018.