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Guerra: "Valladolid es mejor ciudad porque ya no se oye el rugir del León"
El ex presidente del Gobierno afirma que "dentro de poco Rajoy va a tener más amigos en la cárcel que el Vaquilla", en alusión a los casos de corrupción del PP
 El ex vicepresidente del Gobierno Alfonso Guerra, durante su intervención en un acto público de presentación de los candidatos socialistas de municipios de más de 20.000 habitantes en Castilla y León. (Foto: Miriam Chacón)
El ex vicepresidente del Gobierno Alfonso Guerra, durante su intervención en un acto público de presentación de los candidatos socialistas de municipios de más de 20.000 habitantes en Castilla y León. (Foto: Miriam Chacón)
Ical
19/04/2015 (12:04 horas)
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El ex vicepresidente del Gobierno por el PSOE Alfonso Guerra, que asistió hoy a la presentación de los candidatos de su partido en los municipios de más de 20.000 habitantes de Castilla y León, no quiso olvidar el lugar donde estaba y desde el inicio espetó: “Valladolid es mejor ciudad por que ya no se oye el rugir del León al que se le han caído las garras”. En esta misma línea, refiriéndose con ironía al candidato del PP a la Alcaldía, agregó que con “un poco de suerte le cortan la melena”, ante el proceso judicial que sentará a León de la Riva en el banquillo en unos días por un delito de desobediencia.

A su vez, precisó que ha estado en muchas ocasiones en Valladolid y concretó que espera que “no sea la última” ya que, como se autocalificó, ya es un “político retirado y a apunto de cumplir en breve los tres cuarto de siglo”. En este sentido apuntó que habrá personas que piensen que tiene muy buen aspecto y que afirmen “pero qué bien está este tío”, para a continuación revelar su mejor secreto: “Es que la coherencia rejuvenece más que el botox, y mantenerla en las ideas y en la conducta”.

El veterano parlamentario llegó, vio un público receptivo y se gustó por espacio de 56 minutos de intervención, superando con creces los cerca de 22 minutos de su antecesor en el uso de la palabra, el candidato a la presidencia de la Junta, Luis Tudanca, al que postuló como ejemplo de la regeneración y rejuvenicimiento de su partido ya que, según dijo, “él estaba en la cuna cuando yo estaba elaborando la Constitución del 78”.

En torno a la Carta Magna quiso hacer alguna alusión más al decir que debe producirse “para convertir los derechos sociales en fundamentales”. En este punto invitó a que desde el PSOE se intente “no mirar de reojo a los demás partidos y tener un proyecto propio para España y para cada pueblo” y, aunque en el desarrollo del tiempo “se hayan combinado aciertos y errores”, a partir de ahora debe tratarse de “mejorar las condiciones de vida” de los ciudadanos como en su día “ya se hizo con las de miles de campesinos y trabajadores pocos años después de llegar la democracia”.

“Se trata de dar libertad para ser libres”, explicó Alfonso Guerra, al tiempo que -como hizo en muchos momentos de su discurso- recordó que durante la Transición se intentó en todo momento “dar voz a España ya que la había perdido en la dictadura”. Al respecto concretó que fue a partir de 1979 cuando el municipalismo empezó a fortalecerse “y salir del caos en el que estaban los ayuntamientos franquistas”.

Recuperar la justicia social

Respecto a la llegada el PSOE al poder en 1982 indicó que se logró “un país descentralizado donde se concilió la justicia social”, para agregar que actualmente se ha retrocedido 30 años en este aspecto. “Hay que actuar en consecuencia por que el capital industrial y productivo ha sufrido una mutación y ya solo es financiero. Los pobres vuelven a ser para los que tienen riqueza unos vagos a los que hay que castigar. La codicia se ha apoderado de muchas personas y algunas de ellas son de la izquierda”, enfatizó.

“Hay que asegurar los derechos sociales de quienes no tienen fortuna”, espetó, para señalar después que los mercados tiene actualmente tanto poder “que doblegan a los gobiernos”, por lo que abogó en la línea de que desde la Unión Europea “se mantenga una política intervencionista con los mercados financieros”.

Tampoco se olvidó de la corrupción y del ex vicepresidente del Gobierno del PP, Rodrigo Rato, del que dijo que no tuvo problema para encontrar acomodo en tres grandes empresas “después de su salida de Bankia cuando ya se le acusaba de estafa”. En este sentido no quiso olvidarse de Mariano Rajoy al señalar con ironía que “dentro de poco va a tener más amigos en la cárcel que el vaquilla”, enumerando las procesos judiciales que protagonizan Rodrigo Rato, Bárcenas, Jaume Matas o Ana Mato.

Tampoco quiso olvidarse del ex presidente de la Generalitat, Jordi Pujol y del nacionalismo catalán. “Siempre decían que España nos roba y ahora resulta que el ladrón lo tienen allí”, sostuvo. Además añadió que ser nacionalista es “incompatible” con ser socialista. “Lo que se pretende desde Cataluña es un golpe de estado a cámara lenta contra el orden constitucional y hay que oponerse con dureza y no mantener la política de tener contentos a todos”, finalizó. 

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