Una frase que ha 'revolucionado' a los seguidores maristas o a los propios protagonistas del conjunto leonés presentes en las redes sociales, reclamando incluso que "debería ponerse en el Palacio de Deportes"; y que sin duda sirvió como motivación especial para la plantilla de cara a esa recta final en que el Reale Ademar pudo ganar con dos tiros de Ruesga que no entraron, pero también perder con el gol anulado a Knudsen sobre la bocina, y finalmente empató.
Un punto que Manolo Cadenas considera que "para la clasificacion puede ser decisivo", lo cual no quita que afirme que "valoro más del equipo el reto de poder enfrentarse al Flensburg y los jugadores jóvenes vayan viendo lo que es la élite".
Además, el técnico marista resaltaba que "el factor cancha es muy importante, pero esto es León y tenemos que demostrar que aquí mandamos nosotros. Esa actitud y ese deseo del equipo me ha entusiasmado",