Para lograr este importante objetivo es preciso ganar al Estudiantes de Lugo, un rival que ha realizado una irregular temporada, pero que llega al Palacio de los Deportes con ganas de dar guerra a un líder que no sabe lo que es perder en su feudo.
El técnico del equipo leonés Adrián Álvarez ha comenzado ya un trabajo distinto al habitual. Ahora el equipo se centra en entrenar con una mentalidad ya de fase de ascenso. La primera gran prueba la tuvieron el pasado sábado en Zamora ante un rival que no habían logrado ganar nunca. “El equipo tiene que salir ahora con otra mentalidad. La fase de ascenso está ahí y tenemos que jugar los partidos que nos restan de la Liga como si ya fueran de esa competición”, asegura.
La mayor preocupación de Álvarez pasa porque el grupo no salga a este partido con intensidad. “Si salimos pensando que ya está todo hecho y que por ya ser equipo de fase de ascenso ganaremos sin problemas al Estudiantes, estoy convencido de que lo vamos a pasar muy mal”, advierte el entrenador que ha pedido a todos sus jugadores “total intensidad desde el primer minuto”.