Recuerdos de 'oro'

Raúl Álvarez, un delantero leonés criado en el Júpiter y que llegó, de la mano de César, al FC Barcelona, es el único integrante de aquel equipo que puede hacer memoria de aquella histórica campaña. Por ello, Álvarez será el protagonista este domingo en el partido de la Cultural ante el Somozas, en el que se organizará este homenaje, en el día en el que se cumplen exactamente 61 años del debut en Primera División, con victoria leonesa por 4-1 ante el Deportivo Alavés.

Juan Luis Díez, responsable del área social de la Cultural, señala que esta es una dar valor a «nuestra gente». «El gran protagonista tiene que ser Raúl Álvarez. Hoy en día, es la única persona que puede decir que vistió la camiseta de la Cultural en Primera División», asegura.

Manolo Ovalle, presidente de la Asociación de Veteranos de la Cultural, recalca que Álvarez es el único que ha jugado con el club leonés en Primera, Segunda y Tercera. «Desde la Asociación nos unimos al homenaje y le entregareos una placa. Se lo merece», sentencia.

Recuerdos en Primera

Nervioso y sorprendido. Así se sintió Raúl Álvarez cuando recibió la llamada del club ya que «ninguna directiva hasta ahora se ha preocupado de los jugadores de León». El exdelantero de la Cultural accedió encantado para tratar de rememorar cómo eran aquellas tardes de fútbol de Primera.

Álvarez asegura que cada dos domingos se vivía una «fiesta» en La Puentecilla, con gente «de toda la provincia». «Y eso ayudaba mucho. El campo estaba lleno, con gritos de 'Cultural, Cultural'. Ahora ves que hay cuatro personas y se te cae el mundo encima. La gente no ayuda nada, siempre es mejor el de fuera», lamenta.

El integrante de aquella histórica plantilla va más allá, y considera que, con un campo lleno, la Cultural podría volver a Primera. Más optimista aún es Ovalle, que está confiado de que «dentro de no mucho tiempo», el club volverá a la máxima categoría del fútbol español.

«Ahora todo son lujos»

Álvarez también describe como el fútbol de entonces. Reconoce que los partidos eran a las 16:00 horas y «la gente llegaba un poco apurada porque casi no les daba tiempo a tomar el café de después de comer». «Solo teníamos una equipación, gastamos cuatro balón en toda la temporada y nosotros mismos pasábamos un rodillo por las calles de León», recuerda.

Asegura que llegaban a la caseta de La Puentecilla a cambiarse sobre las 14:45 horas y se cambiaban a -2ºC. «Salíamos helados al campo. El fútbol ahora es un lujo», sentencia. Por último recuerda su debut, en Sevilla, partido en el que se tenía que batir con el rudo central Campanal. «Era alto, moreno, fuerte, récordman de los 100 metros lisos. Lo primero que me salió fue decir: '¿Dónde me he metido?'», explica.

Todas estas historias y muchas más tendrán cabida este domingo en los instantes previos al partido. Raúl Álvarez trasladará al aficionado leonés a tiempos pasados de gloria con el sueño y la esperanza de que no tarden en regresar.