La Junta valora los datos y vaticina que con este ritmo de creación de empleo se alcanzarán cifras precrisis a finales de 2020

Gredilla recalcó la tendencia de reducción del paro que mantiene la Comunidad «por quinto año consecutivo», con 50 meses de bajada, que hay que asumir, no obstante, dijo, «siempre con prudencia y con la autoexigencia de seguir trabajando porque casi 163.000 personas siguen sin tener un empleo».

El responsable de Empleo expuso que Castilla y León registró en 2017 el «tercer mayor descenso» interanual, y el cuarto intermensual en diciembre, de toda la serie histórica homogénea de la que disponen, que corresponde a los últimos 22 años. Asimismo, se felicitó porque el dato de cierre del año está muy alejado de los 237.259 parados de finales de 2012.

Mariano Gredilla subrayó, asimismo, que de los 127.000 empleos que se perdieron durante la crisis, Castilla y León ya ha recuperado 74.000, es decir, el 58,2 por ciento. Aseveró que el crecimiento económico que se registra desde finales de 2013, se ha traducido en creación de empleo. «Cinco años en los que se demuestra el vigor de nuestra economía y nuestro mercado laboral», dijo, para reseñar la creación de empleo en 2017, pese al impacto de la sequía en la agricultura y la generación de energía; y la cifra récord de exportaciones de 2016.

En cuanto a 2018, recordó Gredilla que los principales institutos de predicción económica prevén que la Comunidad mantendrá un «importante dinamismo entre el 2,2 y el 2,8 por ciento», un horquilla «muy importante» que permitirá al Gobierno regional «seguir manteniendo como objetivo alcanzar el millón de ocupados» al término de la legislatura. Al respecto, apostó también por seguir perseverando en el Diálogo Social, y constató que en «fechas próximas» verán de nuevo la luz los acuerdos anuales sobre la estrategia integrada de empleo 2016-2020.

Mariano Gredilla manifestó también que Castilla y León se comportó mejor que la media nacional, con un descenso del desempleo un punto por encima de España, 8,53 frente a 7,84 por ciento. Un descenso que, defendió, es «real», y no responde a que la gente «haya salido» de la Comunidad, una afirmación que apoyó en las cifras de afiliación a la Seguridad Social, que se elevaron en 18.600 personas, frente al descenso del desempleo en 15.198. «Hemos sido capaces de reducir desempleados e incorporar algunas personas a la Seguridad Social, por la campaña navidad», dijo.

Gredilla también ensalzó que la reducción del paro llegó a todas las provincias, sectores, sexos y tramos de edad. Una bajada, dijo, «muy importante entre los jóvenes menores de 25 años», del 13,5 por ciento, casi cinco puntos por encima del descenso medio del paro de la Comunidad. «Más de 2.000 jóvenes menores de 25 años abandonan las listas, uno de cada siete encontró empleo, con 58 meses de descenso consecutivo», dijo.

Mariano Gredilla insistió en que se trata de cifras positivas, aunque es preciso, repitió analizarlas con «prudencia y autexigencia, porque no son suficientes». Agregó que cantidad y calidad «deben ir de la mano y debemos trabajar en los próximos meses para avanzar en empleo más estable, mejor remunerado y mucho más seguro».

Sin embargo, constató que en los últimos doce meses se firmaron 78.511 contratos indefinidos, lo que supone que «cada mes se suscriben de media 6.542 contratos indefinidos más, que vienen para quedarse. 215 cada día». Asimismo, señaló que tres de cada cuatro asalariados tienen contratos indefinidos, el 75 por ciento, dos puntos por encima media nacional. Gredilla destacó, además, que los contratos indefinidos crecieron un 12 por ciento en 2017, cinco puntos por encima de la media nacional.

En cuanto a los datos mensuales de diciembre, comentó que en 17 de los últimos 22 años, creció el paro, y entre los cinco en los que bajó se encuentra 2017, por la construcción.