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Silvia G. Rojo
Domingo, 26 de febrero 2017, 12:25
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Hay ocasiones en las que la mejor manera de contar una historia es hacerlo a través de los ojos de un niño y en estos días en Ciudad Rodrigo son muchos los que presencian los encierros acompañados de sus padres o familiares más cercanos, algunos, incluso, dan auténticas lecciones de conocimiento.
El primero de los encierros de este antruejo dio comienzo a las 13:00 horas con tres bonitos toros de la ganadería de Antonio San Román, muy bien presentados, con kilos y con cara, y que completaron el recorrido en 15 minutos.
Con los bueyes, siempre por delante, la manada subió compacta a lo largo de toda la avenida Conde Foxá y fue en la subida hacia el Registro cuando empezaron a descolgarse los animales. Primero entraron los bueyes de Celador Zurdo en la plaza Mayor que se llevaron por delante a un hombre de nacionalidad francesa y habitual de los carnavales, cuando intentaba huir de otro manso en la conocida como Puerta del Desencierro. Tiraron de él para protegerlo pero todavía pasaron por encima varios grupos de personas y el primero de los toros que coronó la plaza convertida en coso taurino.
Posteriormente, y con el esfuerzo de corredores y pastores, entrarían el segundo y tercero de los toros, también por separado y siempre tirando de ellos.
Cuando un padre le preguntó a su hija de 11 años qué le había parecido el encierro la respuesta fue curiosa: «Un toro tenía pelos en los cuernos».
El padre quiso seguir despertando su curiosidad y que completara la historia. «¿Y qué crees que significa eso?» La respuesta no se hizo esperar: «Pues que ese toro ha pegado a los bueyes». Y seguramente así sería. Nada más bajarse del camión los toros, momentos antes de comenzar el festejo, alguno de los todos habrían zurrado a los bueyes porque son animales que no están hermanados y en un primer momento se prueban. Otra cosa es cuando ya salen a la calle, ya sin peleas, pero haciendo la guerra cada uno por su cuenta.
La niña tiene un nombre muy taurino, aunque su padre, gran entendido, prefiere dejarlo en el anonimato.
A veces es necesario ponerse en la mente del niño o en la propia psicología de los animales para comprender los motivos por los que las cosas se desarrollan de una determinada manera y porqué los toros tienen pelos en los cuernos.
Por lo demás, el encierro fue multitudinario y desde una hora y media antes de dar comienzo el festejo ya era difícil hacerse un hueco en determinados lugares y es que no cabe duda que el tiempo cumple su misión y corre con la mitad de la fiesta. El programa taurino de ayer no contemplaba capea y desencierro dado que el encierro del sábado comienza muy tarde por lo que hubo que esperar hasta la hora del festival para volver a ver toros. Después tuvo lugar la capea y el desencierro en el que hubo varios heridos.
Hoy será uno de los días álgidos del carnaval con la celebración del encierro a caballo en que se correrán seis toro de la ganadería extremeña de La Heguijuela y que desde hace un mes pastan en una finca de Buenamadre para hermanarse con los bueyes.
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