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Mejora la ultraactividad en la negociación colectiva y descienden los descuelgues pero los salarios no avanzan

Mejora la ultraactividad en la negociación colectiva y descienden los descuelgues pero los salarios no avanzan

Andrés reconoce los acuerdos con Cecale para parar el «golpe» de la reforma laboral en la negociación colectiva en la Comunidad pero lamenta la «miopía» de la patronal en materia salarial

ical

Domingo, 22 de enero 2017, 17:56

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Sólo uno de cada cinco convenios sectoriales de Castilla y León carece de cláusula de ultraactividad; el 75 por ciento de los nuevos convenios de empresa creados desde la reforma laboral contó con la negociación de CCOO y UGT; y el año pasado sólo se registraron 45 descuelgues, la cifra más baja desde 2013. Sin embargo y según un informe de CCOO recogido por Ical, los trabajadores de la Comunidad perdieron 11,2 puntos de poder adquisitivo durante la crisis, 3,9 más que la media nacional, y el año pasado el incremento salarial pactado en convenio sólo subió en Castilla y León un 0,85 por ciento, frente a 1,08 por ciento de la media nacional, cuando el compromiso con la patronal fue de subidas superiores.

La reforma laboral provocó tres vías de agua a la negociación colectiva, el impulso de los convenios de empresa; la limitación a un año de la extensión automática de los convenios vencidos, la conocida ultraactividad; y la flexibilización de los descuelgues. Tres aspectos que en Castilla y León se han minimizado a través de diferentes acuerdos con Cecale, según el secretario de Acción Sindical de CCOO, Vicente Andrés, quien denunció sin embargo que en materia salarial, la patronal sigue miope.

Hemos minimizado de forma considerable el impacto de estas tres vías de agua con distintos acuerdos y el balance en esa parte es bueno, porque hemos aguantado muy bien el golpe en ese campo de mantener los convenios y aunque no es satisfactorio, el balance no es malo, dijo Andrés, para quien Cecale sí ha respondido para tener una negociación colectiva controlada. Sin embargo, recalcó que la parte mala está en los salarios, y afirmó que en esta materia, la patronal tiene una miopía empresarial de gran magnitud. Para Vicente Andrés la situación refleja que los dirigentes empresariales se mueven por avaricia sin tener en cuenta que el consumo interno es básico para la economía.

La negociación colectiva no se ha desarticulado, hemos mantenido buena parte de los convenios, pero en términos económicos nos ha fallado el cálculo, indicó, para asegurar que el incumplimiento de los acuerdos para elevar más los salarios en la Comunidad que en España, refleja la configuración provincial de la propia Cecale. No hay manera de tirar para adelante en materia salarial porque Cecale está descentralizada desde el principio de la cicatería, la avaricia y la miopía, sentenció.

Andrés destacó que de los 185 convenios sectoriales de la Comunidad (85 vigentes y 100 a negociar), ya apenas quedan 40 sin cláusula de ultraactividad, lo que supone que los sindicatos minimizaron el impacto de la reforma laboral en esta materia. Este año faltan por negociar en la Comunidad 100 convenios sectoriales para 158.072 empleados, de los que sólo 22 para 28.218 trabajadores carece de cláusula de ultraactividad. En cuanto a los de empresas, las cifras que maneja CCOO, indican que están pendientes este año 178 acuerdos para 17.912 empelados, de los que 59 para 4.681 no recogen la ultraactividad.

Vicente Andrés recordó, al respecto, que lograron incluir en el Acuerdo Interprofesional sobre Procedimientos de Solución Autónoma de Conflictos Laborales (ASAC), ampliar la ultraactividad escoba para todos los trabajadores con convenio un año más que el que contempla la reforma laboral, lo que ha permitido ir salvando convenios todos los años y repescar varios.

El dirigente sindical también constató que el trabajo negociador en Castilla y León, permitió asimismo reducir bastante las inaplicaciones, a pesar de que se acometen normalmente en una comisión ad hoc dentro de cada empresa. Hemos achicado bastante la pérdida, dijo, para recordar que normalmente se inaplican durante un año, sobre todo las tablas salariales.

El informe de CCOO constata que el año pasado se produjeron en la Comunidad 45 inaplicaciones de convenios, frente a las 55 del año anterior, las 75 de 2014, y las 122 de 2013. El año de mayor número de inaplicaciones tras la reforma labora de 2012, se vieron afectados 3.495 trabajadores; al año siguiente se redujeron hasta 1.738; en 2015, a 1.295, y el año pasado, a 639.

Andrés comentó, sin embargo, que la madre de las tres vías de fuga son los convenios de empresa. En este sentido, concretó que desde 2012, se generaron 97 convenios, para casi 6.000 trabajadores, pero en las tres cuartas partes de los mismos, estuvieron negociando CCOO y UGT. Estos supone, a su juicio, que lograron un cierto control y participación en estos acuerdos, aunque hayan supuesto un empeoramiento de las condiciones laborales de sus empleados. Por lo menos hemos sido gestores de ese proceso negativo, constató.

Los datos del informe precisan que los delegados de CCOO firmaron en el 20,61 por ciento de los casos en solitario; mientras que los de UGT lo hicieron en el 25,77 por ciento; y conjuntamente suscribieron un 30,92 por ciento.

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