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Una usuaria del CRE de San Andrés con uno de los perros que acudieron a la formación.
Cómo entrenar a un héroe cotidiano

Cómo entrenar a un héroe cotidiano

El Centro de Referencia Estatal (CRE) de San Andrés del Rabanedo acoge la formación de futuros entrenadores de perros de terapia para personas con discapacidad

n. barrio

Domingo, 19 de febrero 2017, 21:44

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Hace dos años, el Centro de Referencia Estatal de San Andrés del Rabanedo hizo una apuesta que, aunque ahora pueda parecer ganadora a la fuerza, requería de una fe inquebrantable. Y en el centro del alfoz leonés no faltaron creyentes.

Hace dos años, este Centro para la Atención de Personas con Grave Discapacidad, conocido popularmente como el CRE, comenzó a trabajar con la empresa EducaDogs en terapias alternativas con perros para mejorar las capacidades de los usuarios del Centro. Así, mientras que en el primer año los esfuerzos se centraron en la investigación, en este ya se desarrollan tratamientos, como explicaba la directora del CRE, María Teresa Gutiérrez.

Durante este último fin de semana cerca de una veintena de profesionales continuaron su formación en San Andrés del Rabanedo como entrenadores de perros de terapia. Llegados de diferentes puntos de la geografía española, compartieron una cita que contaba con una particularidad que la hacía especial, ya que por vez primera los entrenadores noveles llevaban a sus perros.

Completando la tercera jornada de las seis que componen la formación, ocho perros de distintos tamaños, razas y edades compartieron protagonismo con los usuarios del Centro de Referencia Estatal que, como no podía ser de otra forma, estaban encantados.

Francisco Murillo, uno de los profesores, explicaba que «cada perro lleva un entrenamiento específico, ya que se saca partido a sus cualidades aunque pueda cubrir diferentes necesidades o ejercicios».

El servicio del can en cada caso es diferente, pero el ejemplo arroja toda la luz necesaria. «Los usuarios que necesitan fortalecer zonas del tronco necesitan un perro que haya sido entrenado en ejercicios de fuerza, como tirar de mordedores y de objetos». De esta forma, «tirando cada uno en sentido contrario, el objetivo buscado estará más cerca».

Era imposible que alguno de los animales presentes careciera de talento, ya que mientras algunos estaban más preparados a la hora de ayudar a subir y bajar de la silla de ruedas, otros eran más finos a la hora de alcanzar objetos. De lo que no cabía duda es que todos, aunque no necesiten formación, son expertos en regalar una alegría que es más que necesaria.

Por Educadogs han pasado cerca de medio centenar de perros de terapia que han contribuido a mejorar el día a día de personas con grave discapacidad trabajando tanto los aspectos meramente físicos como otros menos tangibles pero igual de importantes, como son los emocionales.

La jornada llega a su fin y la directora del CRE de San Andrés, María Teresa Gutiérrez, da con la clave antes de despedirse. «La gran valía de los perros es que no miran a los usuarios como personas con discapacidad, sino simplemente como personas». Y esa y no otra es la razón por la que la apuesta solo podía ser ganadora.

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