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El Belén de Lorenzana, con su imagen nocturna.
Orgullo de Lorenzana, orgullo de León

Orgullo de Lorenzana, orgullo de León

La localidad leonesa inaugura su tradicional Belén navideño con más de cien metros cuadrados de superficie | La Ermita del Santo Cristo acoge tradición y pasión vecinal por la Navidad

j.c.

Jueves, 15 de diciembre 2016, 21:46

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«Este Belén es un orgullo». Lo asegura con ilusión el alcalde Cuadros, Marcos Martínez, quien no deja de agradecer el esfuerzo de la Junta Vecinal de Lorenzana por dar continuidad a un proyecto envidiable. «Llevábamos 12 años sin hacer este Belén. El pasado año se recuperó y desde luego el Ayuntamiento ofrece todo su apoyo para que tenga continuidad», remarca.

Con ese empeño y con esa ilusión la localidad de Lorenzana ha abierto este jueves las puertas de su belén navideño. Una de las citas más esperdas por estas fechas que se hace realidad en el interior de la Ermita del Santo Cristo.

El Belén responde al citado empeño del Ayuntamiento de Cuadros, la Junta Vecinal de Lorenzana, la Asociación Cultural de Lorenzana y algunos vecinos.

Reclamo turístico

«Es un reclamo turístico a nivel provincial», insiste Marcos Martínez. Se trata de un monumental Belén que puede presumir de que la mayoría de las figuras de barro que lo componen están hechas a mano por vecinos de la localidad, que durante muchos años colaboraron en estas iniciativas desinteresadamente para dar un valor añadido a su pueblo.

Para completar el Belén, a esas figuras autóctonas se sumaron las que compró en Murcia el Centro Cultural en 1980. Mención especial merecen las casas, grutas, montañas y paisajes, que también fueron hechos a mano por los vecinos de Lorenzana, dirigidos por entonces por doña Blanca Fanjul, directora e impulsora de las iniciativas culturales y artísticas desarrolladas en el Centro Cultural de Lorenzana.

El Belén cuenta este año con una cuidada iluminación que imita el día y la noche, además de incorporar figuras en movimiento y montañas sobre las que se ve caer la nieve o como fluye el agua en el lago.

Trabajo de todos

No faltarán las figuras y edificaciones clásicas como La Virgen María, El Niño y San José, el Castillo de Herodes, la casa de la Anunciación, el molino, el desierto con sus camellos, palmeras y jaimas. Y junto a la tradición, un guiño a la localidad con las industrias, algunas ya desaparecidas en Lorenzana, como la botería, la matanza, la herrería, el panadero sacando las hogazas del horno de leña, el carro cargado de harina, el labrador arando, mujeres tendiendo la ropa, cosiendo e hilando.

Marcos Martínez insiste en que se trata de un Belén «de obligada visita» remarcando de nuevo «el esfuerzo, el trabajo, la dedicación y la ilusión de todos aquellos vecinos que han contribuido de manera altruista para que el Belén resplandezca y brille durante toda la Navidad».

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